Restaurante La Malinche — Restaurant in Cáceres

Una decepción. Me habían hablado bien del restaurante pero quitando la decoración que está muy conseguida ha sido todo un desastre. Para empezar, los ingredientes son de una calidad pésima, todo recalentado, algunas cosas incluso frías. Las cantidades de risa, es el único mexicano (y he ido a muchos) donde no me he llenado, no se puede cobrar a 9 euros 4 nachos con guacamole del malo y una plasta de queso. Pues bien, para rematar la dueña (supuse que era la dueña o al menos encargada porque se veía que era la que manejaba el cotarro) no pudo ser más maleducada cuando nos quejamos de que habían pasado 20 minutos desde el último plato y no nos servían el siguiente. Me puso mala cara y se excusó diciendo primero que tardaban tanto porque la gente se quejaba de las prisas (absurdisimo, quien va a querer estar 20 minutos esperando para cenar) y cuando le dije muy educadamente que 20 minutos no era lo normal entre plato y plato me contestó con más altivez si cabe que es que ese plato tardaba más. A ver señora o lo haces a posta porque la gente "se queja de las prisas" o el plato necesita mucho tiempo, cosa que me extraña porque una vez más se trató de unos tacos recalentados. De verdad que si se hubiera disculpado o hubiese sido sincera respecto a si estaban desbordados, se les había olvidado o lo que sea lo hubiera entendido, pero encima de que metes la pata no me vengas en plan prepotente. Al final se equivocaron con la cuenta (4 euros de más porque nos cobraron como jarras las cañas) y cuando mi marido se dirigió a ella para decirselo se volvió con bastante malos modos diciendo "y ahora qué pasa". Resumiendo: mala comida, mala calidad, poquísima cantidad y una dueña que no sabe tratar con el cliente. El peor mexicano que he visitado con diferencia....

Se llamará la Malinche porque todo está mal.

Dos horas de reloj para comer 4 personas un entrante y un plato cada uno. La bebida ha tardado mucho y eso ya debería habernos dado una pista de cómo iba a ser el servicio. El entrante ha llegado también tardísimo y era muy pequeño para el precio que tenía (nachos vegetarianos). Pero como teníamos mucha hambre (porque llevaríamos casi una hora sentados) lo comimos sin poner pegas.

De nuevo, una espera larguísima para cuatro burritos. Primero sacaron dos de los cuatro platos, de modo que nos quedamos esperando a que nuestros acompañantes estuvieran servidos. Tardaron aprox 40 min en traer los otros dos platos. En un punto de la espera, nos llegaron a decir que no nos iban a sacar uno de los platos. No entendíamos nada. El mío, burrito vegetal, no llevaba dos ingredientes que ponía en la carta (los frijoles y el arroz). Estaba soso, el peor burrito con diferencia que he comido. Sólo lo comí porque tenía mucha hambre tras la larga espera, sinceramente.

Eso sí, la cuenta no tardaron nada en traerla, aunque de primeras nos trajeron una cuenta que no era la nuestra. Le echaron la culpa a una "camarera nueva", pero vamos, una sola camarera con poca experiencia no puede ser responsable de la mala gestión de todo un restaurante.

Las camareras bordes y despistadas, el servicio pésimo y la comida en absoluto acorde al precio. La mitad de los platos no los tenían. No se tarda dos horas en traer una bebida, unos nachos y unos burritos con patatas congeladas. No tienen tanta elaboración como para tardar lo que tardaron. Y a parte de nosotros solo había 3 mesas más, así que tampoco se puede justificar con estar desbordados de comandas.

No voy a...

Menuda decepción, hemos estado esta noche cenando en el restaurante y después de habernos servido la bebida (y de habernos puesto mala cara al haber preguntado por una mesa para dos personas) nos han comentado que no tenían muchos ingredientes dado que llevaban una semana más movida de lo pensado. Le hemos pedido la carta (que no nos habían traído hasta que la pedimos) y no nos la ha dado en ningún momento, solo nos decia sus recomendaciones para pedir porque "no tenían más cosas", aún sin entregarnos la carta para mostrarnos que contenian los platos recomendados. Finalmente hemos tenido que pedir las recomendaciones dadas por el camarero a ciegas, ya que nunca nos dio la carta para ver ,durante la hora y media que hemos estado allí, como atendían, entregaban la carta y permitían elegir a tosas las personas que han entrado después de nosotros. Con todo esto y habiendo comido 3 platos (incluyendo el entrante) hemos pagado 50 euros. Tanto a la camarera q nos estaba atendiendo como el chico que nos ha "tomado nota" se les notaba sin ganas de trabajar y haciendonos sentir que nos estaban haciendo un favor por darnos de comer. Se puede entender que se lleve una semana complicada pero no entenderé que se trabaje de cara al público y se de un mal trato ya que todos nos cansamos con nuestro trabajo pero los demás (y más trabajando en un restaurante) no tienen la culpa. Desde luego es un sitio que iba mucho y NO volveré a ir más ya que la comida no compensa el mal...