Restaurante El Pecado — Restaurant in Gijón

Fuimos a cenar 6 personas y varias veces a tomarnos un vino. De aperitivo nos pusieron unos boquerones muy ricos. ⠀⠀⠀⠀⠀ Pedimos 2 de Caviar de Cecina de Wagyu acompañado con tostas y tomate natural 2 de Volandeiras con mayonesa de wasabi 3 de Carne Vacío de black Angus

Postres-Panqueque de dulce de leche, tarta de queso y dulce de leche, milhojas de manzana y castaña y crema de castaña, y nuestra versión de piña colada.

El sitio a mi me encanta, es muy tranquilo, minimalista, cuando se llena no notas barullo… Además no tiene mucha capacidad.

Nos gustó todo. Si me quedo con algún plato, me quedo con el Vacío de Black Angus delicioso, muy blando y fácil de comer. Además te ponen una plancha para darle más punto si lo necesitas. Y Viene con patatas fritas.

Comimos muy bien y agusto, en la única zona que tienen como un mini reservado, el servicio y atención fue muy buena. Si te gusta la buena carne, no dudes en ir. Muy recomendable , incluso como para tomarte un vino, porque ponen buen pincho. Buena relación calidad precio

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Ubicado en el corazón de la ciudad, este restaurante es una joya que no puedes dejar pasar. Desde el primer momento, te recibe un ambiente cálido y relajado que invita a disfrutar de una experiencia culinaria excepcional.

La carta ofrece una variedad de platos que deleitan al paladar; cada bocado revela el esmero y la pasión del chef, logrando equilibrar sabores tradicionales con toques modernos. La calidad de los ingredientes es evidente en cada preparación, lo que convierte la comida en un verdadero festín para los sentidos.

Además, el trato de los camareros fue impecable. La atención, siempre amable y profesional, se destacó durante toda la velada, haciendo sentir a cada cliente especial y bien atendido. Este servicio de 10 complementa a la perfección la calidad de la cocina, creando una experiencia memorable.

Sin duda, se trata de un lugar ideal para celebraciones especiales o para disfrutar de una cena que va más allá de lo común. Una recomendación segura para quienes buscan excelencia tanto en sabor como...

Alcachofas un tanto crujientes (demasiada plancha), mollejas (unas ligeramente tostadas y otras apenas cocinadas) y costilla a baja temperatura con una triste presentación. El local, parece de diseño sueco, poco acogedor; y lo que definitivamente lo transforma casi en un fast food es que mantienen permanentemente la puerta abierta a la calle, lo que no invita a relajarse mucho (exposición a los viandantes de las mesas más próximas a la acera). Esta sensación de comida rápida te la proporciona también la rapidez con la que van sacando los distintos platos, es como si los camareros tuvieran prisa; lo cierto es que para las mesas que son, se muestran excesivamente diligentes: aún tienes en el tenedor el último bocado y ya están preguntando qué tal estaba y esperando a quitarte el plato para el siguiente producto. Esperaba comer mejor, la verdad. Esto suele pasar cuando el restaurante es sólo un negocio y no una apuesta por el servicio...