Restaurante La Blanca Paloma Centro — Restaurant in Granada

Es un bar que siempre recomendábamos a todas las visitas que vienen a Granada porque las tapas y raciones están muy bien. Sin embargo, la otra noche nos tocó vivir una situación desagradable, intento no alargarme:

Llegamos 4 personas para cenar unas tapas y nos ubicamos en la barra donde nos atendió un camarero joven muy apañao (Bryan creo que se llama). Nos pusieron nuestra tapa y, al par de minutos, llegaron 2 amigos más y pidieron sus consumiciones. De pronto apareció tras la barra un "señor" de unos 45-50 años que gritaba mucho y nos puso las dos tapas que faltaban de estos amigos que llegaron después.

Pedimos dos consumiciones más y, después de un buen rato (mientras, este hombre estuvo faltando al respeto al camarero joven que nos atendía llamándole por otro nombre y diciéndole "o como te llames" y haciendo comentarios a un grupo de chicos que había a nuestro lado del tipo "eso para los m4ric0nes" y cosas así), le comentamos que faltaban dos tapas y nos trajo un plato pequeño de calamares. Para nuestra sorpresa, al ponernos el plato se queda mirando y nos dice que tenemos mucha cara, que ya nos la había puesto antes (él no nos estaba atendiendo y no tenía ni idea). Pensando que se había confundido, le dijimos que no, que esas eran las dos tapas de las personas que habían venido después y él insistió diciéndonos que sí nos la había puesto, que le estábamos engañando...

Como podéis imaginar, pedimos la cuenta y le dejamos allí con su plato de calamares. Evidentemente no tenemos pensado volver ni recomendarle el sitio a nadie, más bien al contrario. Por dos miserables tapas nos hizo pasar un mal rato y quedó como un rata.

En fin, sé que es largo de leer y me disculpo, pero quería...

Estuvimos anoche. Mesa de 6, celebración familiar. De entrada, sólo había un camarero para toda la terraza, lo cual ya nos alertó de lo que nos esperaba. Efectivamente teníamos razón. Pedimos bebidas y no nos trajeron las tapas, a 2,80 la coca cola y a 3,30 la copa de cerveza, una de ellas, a la mitad. Pedimos tomate aliñado, chipirones , cazón y huevos rotos. Traen el tomate, un tomatito cortado, de vergüenza la escasa ración. Siguen sin venir las tapas. Traen los chipirones, sin limon, y ración menos que escasa, pedimos limón y un familiar se levanta a la barra y lo trae. Ya supimos que el negocio, sólo estaba atendido por un camarero en la barra y el camarero de la terraza. Mucha gente, bastantes mesas. El camarero no daba abasto, era muy amable, eso sí. El pobre se veía que estaba sin parar, muy eficiente, pero claro, estaba él SÓLO para tanta gente. Traen los huevos rotos, y el cazón, siguen sin traer las tapas. Hasta 7 veces nos dijo que estaban pedidas. Por fín, cuando nos habíamos acabado todo, trajeron un platito con berenjenas fritas. La misma tapa para 3, la mesa de al lado eran 2 y misma cantidad. Nos quedamos con hambre y pedimos una de calamares. Raquítico ración, sin siquiera una rajita de limón. Parecía que eran los que habían quedado en la freidora, nada apetitosos, ni tiernos. Un cero Vergonzoso. Por supuesto, no volveremos ni lo recomendaremos. 90 euros por estar mal servidos, mal comidos. Nos echó por alto la noche. Señor propietario, si no tiene personal, no ponga tantas mesas. ESTO ES UN ATRACO A...

Mi experiencia hoy agridulce, porque me da lastima ver otro bar más que se apunta a la fastidiosa moda de bloquear mesas en hora punta, preguntar si vas a comer o tapear, y decidir a quién permiten o no sentarse a su criterio. Es muy desagradable salir con los niños un fin de semana y querer sentarse a las horas habituales de comer, y tener que estar sufriendo estas cosas, es denigrante y un abuso al consumidor. Tener que andar suplicando las tapas al servicio porque se hacen los despistados, escuchar cosas como en esa mesa no se tapea porque yo lo digo, cuando estás viendo que las mesas de al lado sí están tapeando... Darte cuenta que cuando ven que vas con niños se inventan mesas en reserva que en realidad no lo están... Señores, no somos borregos, no nos dejemos tratar como tal. Yo al menos ya he llegado a la conclusión de que cuando vaya a un sitio a dejarme un dinero, porque pagamos bien el servicio, y note estas cosas, mi valoración será negativa, aunque la comida esté bien, y aunque a pesar de todo hayamos pasado un buen...