Restaurante Asador de Aranda | Asador de carne en Oviedo — Restaurant in Oviedo

..Como clienta habitual tanto mi familia, amigos como yo, lamentablemente me veo obligada a exponer la bochornosa situación vivida en el dia de hoy con el camarero que se ocupa de la terraza de su restaurante. Acudimos como en numerosas ocasiones a su local, con la intenciòn de disfrutar de unas mollejas a la parrilla y unos riñones, uno de los numerosos exquisitos platos que nos gusta pedir bien en barra cuando acudimos sin reserva o como en este caso en la terraza que había una mesa libre. Preguntamos al camarero que se ocupa de la misma y que me suena vagamente de haber visto anteriormente en otro asador y nada màs llegar ya nos puso inconvenientes ( como nos ha ocurrido en màs de una ocasiòn en su restaurante) y que antes tendrían que ser atendidas las numerosas mesas que había delante de nosotros, mesas que ya estaban sentadas. Somos conscientes de que cuando uno acude a un local sin reserva lògicamente es normal que pueda existir espera, pero la actitud tan antiventa de este señor y las formas pueden determinar que te importe o no dicha espera y máxime si la misma, es para el disfrute de una exquisita comida típica de un restaurante de prestigio como es èste. Una vez nos sentamos en la mesa de la terraza mientras la preparaba insistiò en que las había muchas mesas que atender antes que nosotros, pero que nos podía servir la bebida, motivo por el cuàl y tras su comentario le solicitè una cerveza, tras lo cuàl y de inmediato me aclarò directamente: literalmente me quedè sin palabras. No me había sentido nunca tan abochornada, se me quitaron por completo las ganas de comer ante tal comentario. Aún así decidimos permanecer en la mesa y cuando terminò de montar la misma y trajo la carta, una vez màs reiterò que había muchas mesas para atender antes que la nuestra y que tendríamos mucho que esperar, hablamos de mi marido y de mi, y de las 15 h aprox y por nuestra parte no era un problema la espera, pero creo que este tipo de actitudes tan poco comerciales y que desvirtúan la tan merecida fama de un Asador como éste y que además son reiteradas como refiero al inicio de mi exposiciòn, no deberían de tener lugar. Señalar que hemos sido clientes tanto del restaurante como de un picoteo en barra, casi todos los años encargamos su maravilloso lechazo y su cochinillo para Nochevieja y Navidad, tanto mi familia como yo, desgraciadamente tardaràn en volver a repetirse, una vez que me he sentido insultada. Un saludo y gracias por...

No suelo escribir reseñas pero tras una larga deliberación he de hacerlo. Hace años, poco antes del Covid fui al asador, éramos cuatro personas y comimos como dios, por poco mas de 100 pabos. Recientemente, organicé una comida para unas 10 personas, el grupo de colegas de toda la vida que durante unas semanas le estuvimos dando vueltas a donde ir a comer y tal. Nos decidimos por el asador porque yo y otro del grupo teníamos un buen recuerdo y pensamos que íbamos a comer carne por un tubo hasta pillar la Gota, como pasó aquella vez con un buen lechazo al horno.

Para nuestra sorpresa:

En primer lugar preguntamos si el cochinillo y el lechazo venían sobre un "lecho" de patates frites, pero el Maitre dijo que no, por tanto pedimos las raciones que nos recomendó para las personas que éramos, porque nosotros sugeríamos una por persona. Pues bien, una por persona hubiera estado correcto porque era un mísero cuenco como una tapa de bar.

En segundo lugar, tardamos apenas 10 minutos en comer toda la carne que había en la mesa, las raciones eran muy insuficientes, nada comparado con aquella otra vez que recordábamos, y además la carne no iba muy allá comparado con otras parrillas y asadores del norte. Algunos de los comensales comentaron "se me prometió que iba a coger gota, y de gota nada".

En tercer lugar la sorpresa final fue con la cuenta, la friolera de casi 40 pabos por persona por una comida de la que salimos para merendar directamente. En definitiva, habiendo lo que hay para comer carne por Asturias no recomiendo nada el Asador dada la pérdida de nivel que ha...

El chuleton no estuvo a la altura. Bonita terraza para tomar algo, el interior es espectacular. El servicio muy amable y atento, Todo genial excepto a lo que habíamos ido a comer, un chuleton. ( lo dejo para el final ) Al sentarnos nos trajeron unos dados de queso en escabeche que no había tomado nunca, muy buenos. Entrantes, queso de oveja muy bueno. Postres, tarta de queso y arroz con lexhe muy ricos, de lo mejor que he probado. Tuvieron el detalle de sacar con los postres unas rosquillas de anís con chupitos de mistela muy buenas también. Los vinos, blanco y tinto también muy ricos, todo genial.... pero el chuleton: Pieza de 1 kg (82 €). Al llamar para reservar la pusieron a atemperar, buen detalle. Vino acompañada de patatas y pimiento rojo. No lo indica la carta pero esa carne tiene algo de maduración, 2 meses nos dijeron al preguntar, lo digo por aquellos que no les guste la carne madurada. A mi no me gusta pero en este caso solo se aprecia un poco la maduración y no afecta al hecho que no nos gustase mucho esta chuleta. Cocinada al punto perfecta. Al lio: al meterle el cuchillo no había forma de cortarla, y en la boca se hacia bola. La mitad de la chuleta costó comerla, la otra mitad estaba algo mejor más tierna y comparándola con la parte dura inicial, pues al final estaba casi bien pero no.. Hemos comido chuletas de 56 €/ kilo infinitamente mejores, una pena. En el conjunto final bien, porque el resto de cosas estaban muy buenas y el servicio excelente. Volvería? Si, pero no a...