We had an odd experience with their food and service. We ordered entrecot meat-as soon as the three of us there tried it we knew it wasn’t right, the meat had an unusual acid after taste, it was past it’s fresh lifetime (we are regular meat eaters). When we told the waiter, he took it to the kitchen and came back saying there was nothing wrong with the meat, only offering that they cook it a bit more for us. We said we were not interested in that piece of meat, it wasn’t in good shape, but he didn’t offer to bring out a new piece for us. We rejected the offer and asked for the bill. The chef came out from the kitchen to justify that the meat was fresh and this was the first complaint they had received- the two pieces he showed didn’t not look as fresh as he said, he did not offer us to replace the meal, nor did he say sorry. The best part: when they brought the bill they had included the entrecot; we complained, they said: they had cooked it for us after all, we just didn’t like it and that was a personal opinion. ...
Read moreResumen rápido: 100% recomendable.
Restaurante relativamente pequeño pero acogedor, y, sobre todo, MUY BIEN atendido y rápidos también. Se encuentra a 5 minutos a pie de las calles principales, en dónde por ejemplo en Navidad ponen el Belén Monumental (no viviente) que es un clásico de El Escorial.
Fuimos a comer en el primer turno, aspecto a tener en cuenta, aunque sin prisas porque se dispone fácilmente entre 1,5h. y 2 horas para comer, que creo que es tiempo más que de sobra. Reservamos previamente, nada menos que 7 niños y 8 adultos. Y nos ubicaron en dos mesas contiguas tal y cómo habíamos acordado con ellos. Sólo nosotros llenamos aproximadamente el 50% de las mesas bajas del restaurante, pero estuvimos bastante cómodos. Nada que objetar en este sentido. Había más mesas bajas y luego un par de mesas altas que también fueron ocupadas posteriormente y que tenían pinta de ser también cómodas.
Con respecto a la comida, sólo puedo tener muy buenas palabras para todos los entrantes, platos principales y postres que pedimos en las dos mesas.
Como entrantes, el premio a las mejores croquetas de El Escorial lo tienen muy merecido. Es un plato imprescindible y dimos buena cuenta de ellas. También es muy recomendable el volcán de patatas bravas, una buena razón de patatas con una salsa casera muy bien resuelta con el picor justo de bravas.
En cuanto a los platos principales la verdad es que todo lo que se pidió estuvo muy bien. En las mesas de los más pequeños los platos de pasta de diferente tipo ganaron por goleada, y todos quedaron muy contentos.
En las mesas de los adultos se pidió gran variedad de platos, y estaban todos muy buenos, con muy buena calidad y cantidad. Muy recomendable sin duda: el tartar de salmón marinado, el tournedo de cerdo ibérico, las carrilleras de cerdo al Pedro Ximénez, las costillas de cordero (estaban fuera de carta y era una muy buena ración), y también los huevos rotos con setas. Todo muy bien hecho, y con unos ricos acompañamientos.
Y qué decir de los postres, pues que también muy muy ricos todos los que probamos, las natillas muy finas y cremosas, y lo dice un goloso de las natillas. Para los amantes del chocolate, el coulan de chocolate también muy rico. La tarta de queso también estaba muy rica, aunque la ración se hacía un poco larga para 1 sola persona. El arroz con leche estaba rico, pero fue el que menos me gustó (personalmente). En resumen, muy ricos y perfectamente se pueden compartir como poco entre cada 2 personas.
Y por último, en cuanto al precio, pues la verdad es que, con 4 entrantes 1 principal para cada persona, una buena cantidad de postres y las bebidas, agua, refrescos y cervezas (cierto es que no pedimos vinos), la cuenta salió a 22€/persona. Y por la calidad y cantidad de los platos puedo asegurar que es una cantidad más que razonable para lo bien que comimos.
Creo que alejarse un poco de las calles principales hace que se esté más tranquilo y muy bien...
Read moreMenudo espectáculo bochornoso he tenido que presenciar por la mala gestión de un problema. Estábamos comiendo cuando han llegado unos clientes que tenían reserva y el dueño les ha contestado de muy malas formas que si no habían llegado en hora y, por tanto, habían perdido la mesa, y claro, se ha empezado a montar el lío. Han comenzado a discutir sobre la hora de la reserva. Los clientes decían que habían reservado mesa entre 14:30-45 y que el dueño les dijo que si podían venir a las 14:15, pero los clientes decían que habían dicho que lo intentarían pero no se comprometían, y como llegaron a las 15h pues el dueño decidió anular la reserva porque para él la hora era a las 14:15, y bueno, la verdad que entiendo el cabreo de los clientes porque la soberbia y chulería del dueño ha sido bochornosa, y encima venían con un bebé y dos niñas pequeñas. Muy mal gestionado el ni siquiera buscar una solución, pero lo peor fue echar en cara a los clientes que algunos comensales después de reservar no se presentan…¿¿que tendrá eso que ver ellos?? Me llega a pasar a mí con mis niños…y bueno, la verdad que no sé cómo me hubiera puesto, pero entiendo el cabreo de los clientes. Una pena, pero no pienso volver por aquí para ver la cara de amargado del dueño. La verdad que se le ve infeliz, pero no por eso tiene que pagarlo con alguien que se ha retrasado algo en la reserva. Gestionar un negocio de cara al cliente con esa actitud no le puede traer nada bueno. No pensaba escribir nada, pero después de presenciar la discusión me metí en las reseñas a ver si había comentarios sobre el dueño y algo encontré, pero ha sido después de ver las respuestas del dueño, llamando encima mentirosos a los clientes es cuando he tenido que escribir la verdad como testigo presencial no implicado. ¡Hasta...
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