The food and service was really great, but Its totally overpriced, and portions are acually really really tiny. We had guacamole and croquetas for a starter, under a lot of totopos (corn chips) you could find like literally two spoons of (reaaly tasty) guacamole. 4€ for a single croqueta is also a crazy price. Then we had a mushroom quesadilla (half of one actually - wiater siad its a big porton so they cut it in half - so you get 2 quarters of a quesadilla) and ceviche („big portion”, which is actually a small starter) as mein dishes. It was really delcious and the service was amazing. But paying 80€ (plus 3 glasses of wine and 3 beers) for this was truly exessive. I’ve been to many restaurants all over the world, and you can eat better even in superexpensive Paris for that price, having a more luxury experience. I also get the concept of small portions, but after a dinner for 41€/person we were still kinda hungry. To be clear, we were two women, and not two futball players who trained for six hours before dinner ;-). Was nice but wouldnd go...
Read moreVaya manera de exprimir al personal, hemos caído allí en un giro de la mala suerte, nos encontramos una pareja de la zona y al ser tarde, preguntamos dónde podríamos cenar, uno nos dijo que nos fuéramos a otro lado y ella que lo que nos quedaba más cerca era eso, él insistió en que nos fuéramos a otro lado, pero estábamos cansados y nos quedaba cerca del hotel. En qué mal momento, le teníamos que haber hecho caso a él.
Entramos y el sitio parece la cocina de un hospital, gris, fría, impersonal, la zona de la cocina se ve desde las mesas, algo que en algunos sitios funciona muy bien pero que en este caso, da más sensación de algo triste.
Todo parece rodeado de cemento sin más, el único toque de alegría está en el dibujo de la camiseta de los camareros, que debo decir son bastante atentos.
Al ver que en el menú había comida mexicana, nos hizo especial ilusión por que no sólo nos gusta muchísimo, sino que además controlamos 100%. Nos pedimos un tamal y una orden de tres tacos al Pastor, dos platos muy populares en México, el primero de casi fácil elaboración y el segundo no tanto, pero tampoco nada del otro mundo. Una característica de los tacos al pastor es que se hacen en un «trompo» que va girando hasta asar la carne muy lentamente (muy parecido al rollo del kebab), el trompo no lo vi por ningún lado pero me imaginé que no toda la cocina estaría a la vista.
Nos trajeron un tamal pequeñito, bastante pequeño pero bueno... Lo que ya fue un insulto, fue cuando llegó la orden de tacos, tres tacos con una tortilla que se rompía al no haber sido calentada correctamente, con carne en cada uno de ellos que cabía en un tenedor, que estamos hablando de carne de cerdo, una carne que es una de las más baratas y nos ponen un intento de relleno de tortilla. En serio? 12 euros para eso?
El sabor no está mal sin llegar a ser nada del otro mundo, pero salir de allí con la sensación de haber picado cacahuetes en un bar es un trago amargo y decepcionante por no decir cabreante. En un sitio como San Sebastián donde casi en cualquier esquina se come fantásticamente, no entiendo que hagan ese tipo de cosas.
Hemos comido mexicano en distintas provincias de España, nunca tan poco, caro y regular.
Es posible que tengan una idea bastante distorsionada de lo que es acertar con una carta de ese tipo para quien va a cenar y ve que hay comida mexicana, es posible que para quien nunca ha ido a México a comer se entienda que hagan cosas así, y ni así se entiende por que 12 euros por un aperitivo es inaceptable.
No hace falta que diga que es un sitio que no recomiendo, la misma gente se dará cuenta que no merece la pena ir y será del mismo modo que nosotros, o sea saliendo de allí con cara de «¿¿¿quéeeeee???» pero con varios euros menos...
Read moreMy friend and I went here for a small bite and some drinks, but we had an mixed experience in the end. On the positive side, the place looked really nice with a good welcoming ambience.
The food was decent but we expected more for the price point. However, the evening took a turning point when a waiter, unexpectedly approached us in a quite agitated mamner insisting we couldn't occupy two tables. We explained the situation, being that the couch my friend was sitting on was broken an thus slided to the next spot, given the place was mostly empty. We were quite surprised by the agitated manner, especially when he maintained his stance despite our reasoning. We were disappointed in the service and the way the situation was handled, since it didn't need to ba an issue at all.
Everytime combined we think there are better restaurants and bars nearby that would make a better...
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