OLIVIA SANTANDER — Restaurant in Santander

He sido clienta del Olivia muchas veces bien sea comiendo allí o a domicilio y siempre he vuelto porque para mí es el sushi más rico de Santander, al menos, de los que yo he probado. No obstante, esta última ocasión en la que he acudido a cenar, no ha sido para nada una experiencia agradable.

Acudimos 2 personas a cenar en el segundo turno disponible. De los comensales de este turno fuimos los primeros en llegar y por tanto, nos tomaron nota los primeros. Sin embargo, nos sirvieron los últimos de todo el comedor, tardando más de 40 minutos, mientras que a otras mesas habían servido ya varios platos. No decimos nada al respecto ya que entendemos que puede ser un error de organización y empezamos a cenar pasadas las 23:10. Sin embargo, llega el final de la cena y ya la situación se vuelve indignante. Pedimos la cuenta, pagamos con tarjeta, no dejamos propina como siempre hacemos dado que el servicio ese día no ha sido bueno. Y CUANDO YA HEMOS ABANDONADO EL RESTAURANTE Y ESTAMOS DANDO UN PASEO POR LA CALLE PERÑAHEBOSA, el camarero del Olivia nos sigue con el datáfono y nos detiene en mitad de la calle para comentarnos que su compañera ha hecho mal la cuenta de nuestra mesa y no ha incluido un enasalada Wakame por VALOR DE 6 EUROS y que si por favor podemos pagar la diferencia de esos 6 euros. Mi pareja y yo accedemos a pagarlo, pero nos quedamos perplejos ante lo VERGONZOSO de la situación.

En primer lugar, no habíamos detectado nada en la cuenta ya que era una cuestión de 6 euros que una cuenta de 70 euros de 2 personas, pasa inadvertida si no revisas con atención la cuenta. En segundo lugar, NO SON FORMAS de tratar a unos clientes, y menos aún cuando hemos acudido al restaurante en múltiples ocasiones y mucho menos aún, cuando ha sido un error vuestro. Sinceramente vergonzoso.

Lo mínimo que procede es...

Great fusion sushi.

Nicely decorated, restaurant with friendly waiting staff.

This was sushi with a twist. In Japan many people say "simple is best" meaning it's better not to complicate the flavours if you have high quality ingredients. I agree with that philosophy for the most part but defiantly think that once in a while it's good to have a new/different experience such as this restaurant.

Dishes were served with style. The flavours were complex and powerful (maybe too strong for traditionalists) but well balanced and skilfully put together.

A...

Primera visita en agosto 2019: local abarrotado, nos informan de que tenemos 45 minutos para comer y que tiene que ser en barra, aceptamos y la verdad es que la experiencia fue muy buena, todo muy rico y apetecible, bien elaborado, y comimos cómodamente dos personas en el plazo establecido. Lo peor: el insufrible calor que hacía en el local, todos los camareros sufriendo y los comensales también. Pero en general salimos encantados y con muchas ganas de volver.

Segunda visita en junio 2020: lunes, pasamos sin reservar y también nos dan un plazo de una hora para comer (parece ser costumbre del local). Local medio vacío (suponemos que por la medidas del COVID-19), pedimos, nos traen la bebida y no volvemos a saber nada de nadie. Pasados 50 minutos nos llega uno de los uramakis que habíamos pedido y tenemos que reclamar salsa de soja (igual que todas las mesas de nuestro alrededor). El uramaki estaba goloso (aquí hacen makis y nigiris fusión con muchas salsas y demás), pero el salmón no hacía apenas acto de presencia. Visto el panorama, 15 minutos después pedimos la cuenta: tuvieron eso si el detalle de invitarnos a parte de la consumición. Los cocineros no dejaban de sacar platos pero casi ninguno llegaba a la sala (donde estaban todas las mesas recibiendo platos con muchísima separación), así que suponemos que estarían a tope con pedidos a domicilio. En general una experiencia para no repetir,...