Reservamos para celebrar la cena previa a Navidad un grupo de amigos, formado por 7 disfrutones del bon vivant y del buen comer, pero sin ser quisquillosos, lo que apunto para tenerlo en cuenta de antemano. La cena consistió en varios entrantes al centro para compartir y un par de chuletones. De entrantes se pidió ensalada de burrata y tomate; pulpo brasa; calamar plancha; pan bao; y, torreznos laqueados. He de reconocer que todos los entrantes nos sorprendieron gratamente, no sólo porque todos ellos estaban cocinados en su punto de cocción, sino porque, además, todos estaban buenísimos. Hasta aquí todo bien. El problema vino con los chuletones. Para empezar nos sacaron un chuletón de 2 kg en una pieza que previamente exhibieron crudo a la mesa y que, dado que éramos 7, solicitamos nos lo partieran y trincharan cada uno de ellos para comerlo más cómodo entre todos. Inicialmente nos dijeron que no era posible partirlo, por lo que dijimos que, en vez de servirnos el de 2 kg., nos sirvieran dos chuletones de 1 kg. aproximadamente cada uno. La respuesta a tal petición, tras acudir a cocina el camarero y volver a la mesa, fue que, casualmente y tras haberlo consultado, sí era posible partir el chuletón inicial de 2 kg. Y trincharlo, lo que agradecimos. A pesar de que los pedimos "al punto", ambos los sirvieron pasados de punto, sobretodo uno de ellos que, debido a que era como una suela de zapato, nada más probar el primer trozo, estando prácticamente entero el chuletón, se lo dijimos al camarero, distinto del que nos había tomado nota de la comanda inicialmente, para que lo retirara y que nos sirviera uno nuevo, cocinado como lo habíamos pedido: al punto. Todo ello no antes sin exponerle lo "seca" que se encontraba la carne, algo que se podía apreciar a primera vista, ya que la carne prácticamente no estaba sonrosada por el centro y ningún jugo sudaba, por lo que, asintiendo con la cabeza lo que le manifestábamos, la retiró, diciendo que servirían otro chuletón en su punto. Tras ello, volvió el primer camarero que nos había tomado nota para contradecirnos acerca del chuletón devuelto, contestando que el punto de la carne era muy relativo, y que él lo veía bien, pero que no obstante ofreció la posibilidad de cambiarlo, lo que reiteramos, ordenando otra botella de vino para acompañarlo. La botella se sirvió. El chuletón no. Transcurrido un tiempo razonable sin que lo sirvieran, se reiteró. Si bien, esta vez el camarero se descolgó de nuevas diciendo que no podían servir otro chuletón, y que si queríamos nos podían compensar con los postres. La decepción fue tal que, siendo como era un sitio de buena referencia para los que compartíamos mesa esa noche, al que acudíamos juntos o por separado con relativa frecuencia, han conseguido que no volvamos y lo borremos de la lista. Considero que la respuesta dada por el camarero frente a una sugerencia flagrante que se pone de manifiesto educadamente por el cliente y que es contrariada por el personal sin justificación alguna, no es de recibo. Mucho menos cuando en la cuenta, de 60 €/persona, cobraron la carne que no sirvieron, de todo lo cual se advierte a futuros...
Read moreHola,
Me encantó este sitio.
La semana pasada estuvimos cenando en este restaurante porque estuvimos en el Palacio de Congresos viendo una actuación y lo recomiendo al 100%.
Fuimos mi pareja y yo y de entrantes pedimos:
Degustación de croquetas: hay varios tipos le preguntas y la puedes cambiar. Creo que cogimos 1 de bogavante, 1 de rabo de toro, 1 de jamón y 1 de champiñones/setas. Somos fanáticos de las croquetas, siempre las pedimos, y las de este sitios nos gustaron mucho mucho. Crujientes por fuera y cremosas por dentro y tenían un sabor intenso. Probadlas.
Pulpo braseado con membrillo: el pulpo perfecto, se deshacía en la boca. No somos muy fanáticos del membrillo, por lo que hubiéramos preferido que la base fuese de patata, pero lo probamos y también estaba bueno.
Queso brie frito con salsa frutos rojos: este no lo recomiendo, nos arrepentimos de pedirlo. Queso que no decía nada, sabor poco intenso y bastante simple. Lo hubiésemos cambiado por las alcachofas, vimos en otras mesas que tenían una pinta brutal.
De plato principal nos cogimos una carne para compartir:
Secreto ibérico con ragu de salsa de frutos secos: el secreto muy bueno, se notaba que era ibérico por la grada intramuscular, estaba en su punto, el único pero es el acompañamiento. No nos gustó mucho la salsa y los frutos secos, vino cocinado en vapor a baja temperatura. A mi pareja le gustó algo más, pero a mi no.
Y para finalizar un postre:
Tarta de queso con helado de fresa: buenísimo. No es la típica tarta de resto de restaurantes, excelente textura y sabor. Hacia tiempo que no probábamos una tarta de queso tan buena y también la solemos pedir siempre.
En cuanto al servicio de 10. Personal muy atento y muy simpático, están constantemente preguntándote si necesitas algo.
Yo seguro que vuelvo porque nos encantó. Comida de mucha calidad y servicio inmejorable.
En cuanto al precio, nos costó sobre 35€ por persona, en absoluto nos pareció caro para la calidad y servicio que ofrecen.
Me quedé con las ganas de comerme un chuletón, ya volveré y lo...
Read moreI used to love this place, everything was always flawless. But today both the service and the seabass were a complete disaster. They brought me the same piece of fish four times, each time smaller than before. At first it was undercooked, and afterwards it kept coming back completely overcooked and dry. On top of that, the waiters were completely inattentive — nobody came to our table, even though we had ordered a bottle of wine and all the main courses. It felt like total neglect. Either these are new waiters or I don’t know what happened, but the whole experience was just awful. Such a huge disappointment, and unfortunately this time I can only leave a very...
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