Plaza Sucre es el denominativo histórico de esta plaza paceña. Más conocida como la plaza de San Pedro, es singular por el equipamiento que la circunda, una iglesia de armadura modesta con algunos elementos alegóricos en su portada correspondientes al barroco mestizo tardío simple. Edificaciones de fines de la colonia en sus otros dos frentes y lo más importante el edificio que abarca todo un manzano de la cárcel de San Pedro, nombres homólogos, tanto del recinto carcelario como de la iglesia. La plaza inicialmente una empanada casi vacía, se convirtió en el escenario de ajusticiamiento de reos rematados condenados al fusilamiento. Práctica que se mantuvo mientras duró la pena de muerte en el código penal. Curiosamente el paredón contiguo al atrio religioso, hoy construye la pared y puerta principal de una modesta escuela pública . Poco a poco, se fue armando la plaza con cuatro cuarteles con vías diagonales , selladas en su intersección con un basamento que en su cima alberga el busto del Mariscal António José de Sucre, segundo hombre de los ejércitos patriotas del Libertador Simón Bolívar. En una de sus esquinas conserva una coqueta glorieta. Actualmente pequeño lugar de esparcimiento barrial, con algunas ventas casi ambulantes de repostería artesanal. Destacan los raspadillos y helados; siendo el primero con hielo raspado y algún jarabe con esencias.