MERCURE LIMOGES CENTRE — Hotel in Limoges

Our first impression of this hotel was pretty bad, but things rapidly improved. The process of checking in with luggage is a bit tough - there is a tiny space for temporary parking on the back side of the hotel, where the street looks a bit dingy, and no help with bags. Underground parking was challenging to find with one-way streets. ||||However, once in the room things looked much better. Our room faced the other side of the building, with a nice and lively plaza. Lots of restaurants and bars, but the shutters on the room windows keep out the noise so it's not a problem. We had a fantastic meal at philippe redon, and enjoyed the town. It felt pretty safe in the plaza side of the town, and the location of the hotel is good for this reason.||||The room was recently renovated, and nicely laid out and furnished. The bed was also comfortable. We would recommend this hotel...

We were passing through the area and stayed only one night. The hotel has a large presence in the Place de la République area, with many cafes, restaurants, small grocery store, etc nearby. Since we have a rental car, having nearby parking is super helpful. The garage is connected through a short walkway, with plenty of spaces. The hotel is secured in the way that you have to buzz to get in from below.||Our room was on the higher floor. Elevator available. It was spacious and the bathroom is nice. Shower is on the smaller side. AC worked great. Overall, we appreciated the English speaking front desk staff. Our French is very poor.||Note that parking is not included in the room rate. We walked to the cathedral, Hôtel-de-Ville,...

Nos hemos alojado dos veces en este hotel durante este verano, siempre en habitación superior. Es ideal como hotel-etapa en viaje largo, tanto por ubicación como por parking (12€/noche) con acceso directo al hotel.||El desayuno (15€/persona) no da lo que promete la expresión "productos orgánicos": lo son las confituras y algún yogur. El queso, los embutidos y los huevos son vulgares, igual que el pan y la bollería, y la fruta es poco variada e insípida, y desde luego no orgánica. Eso sí, todo es abundante y el personal de sala muy agradable. Cuando di mi opinión a Mercure, me respondieron que ellos no tenían unos embutidos tan ricos como en España: supongo que quisieron ser amables, pero suena realmente folclórico y no resuelve lo que les indiqué: falta de variedad de producto fresco y orgánico.||En nuestra segunda estancia, yo había reservado en ruta a través de internet, indicando una tarjeta de crédito como garantía. Al irnos pagamos con la de mi marido tanto la noche del alojaiento como los desayunos. Ello no obstante, el importe de la noche fue cargado en mi visa, por lo que protesté. Me contestaron que primero cargaban la noche contra la tarjeta dada en garantía y una vez pagada, la anulaban, que algunos bancos extranjeros iban lentos en anular el cargo, pero que ellos habían cumplido y no me cobraban doble, y me mandaron copia de un tiquet de anulación de cargo que bien podrían haberme dado al pagar allí, o más fácil aún, podían haberme indicado que la noche estaba cargada y que sólo quedaban por pagar los desayunos.Me respondieron que gracias por la opinión y que no tienen la costumbre de dar el tiquet de anulación. Hoy por fin ha desaparecido el cargo indebido de mi visa.|| Viajamos mucho a Francia desde hace muchos años, usamos habitualmente los hoteles Accors y es la primera vez que nos pasa esto.Deduzco por tanto que es un tema de torpeza en la gestión de ese hotel en concreto, no del grupo. Naturalmente, esta experiencia, que me ha ocupado desagradablemente unos cuantos ratos los últimos 3 días, borra cualquier opinión favorable al respecto, y si no doy la mínima es porque el personal del desayuno era muy agradable...