El Scary Witches — Restaurant in Mexico City

Se nota mucho el mal servicio de la actualidad, antes el Scary Witches era un lugar en el que te identificabas con la tematica y la buena música dentro de los géneros asociados a la tematica del lugar, adicional a que el personal antes estaba abierto a escuchar peticiones musicales y daba un cálido y buen servicio. Ahora ha cambiado para mal y mucho, se nota abismalmente que ya no es y ya no son lo que eran antes, no aceptan sugerencias musicales y solo te responden diciendo que pues esta una Playlist y hasta que se acabe va a dejar de sonar ese género, es decir que solo le dan reproducir a una Playlist y te aguantas si te gusta o no, ya no hacen el mínimo esfuerzo de curar la selección musical y ya ni siquiera porque esta sucesiva y ultima visita mía, fue en fin de semana. Los meseros dan un servicio regular llegando a malo. Pero más en particular uno de los meseros que abiertamente te dice que te va tardar mucho en traerte tus platillos, por este motivo me cambie de mesa en donde atendía otro mesero que trajo mi ordén rapido. Y lo peor es que quieren justificar su mal servicio pensando que los comensales somos ignorantes, argumentando un exceso de carga laboral por el pésimo servicio del mesero. Ya que no estamos hablando de otro ex bar - antro con la misma tematica que estaba en Insurgentes, Hablamos del Scary Witches y su afluencia actual se asemeja a la de la pre-pandemia por lo cual no hay excusa de exceso de carga laboral para un bar pequeño que no estaba en esta mi ultima visita a su máximo cupo y que tenía 5 integrantes de personal de servicio (El cual uno de estos integrantes del personal solo se queda viendo a todos y a todo, pero no hace ni mueve en absoluto nada). Al cambiarme de mesa por el pésimo servicio del primer mesero que me atendió y que recibió quejas en esa misma noche, no solo de mi mesa si no de varias otros comensales, Este mesero ya no atendiendome de la nada me trajo a mi mesa un platillo el cual yo no ordene por lo que le pregunte en ese mismo momento si el platillo era para mí, lo cual respondió que sí. De acuerdo al reglamento de restaurantes y bares de la ciudad de México, si un mesero te trae un platillo o bebida que no pediste, y que el mismo no te informa al momento de traerlo que tiene un costo, el platillo y/o bebida es considerado totalmente como cortesía y no se tiene que cobrar, pues resulta que como menciono arriba, este pésimo personal de servicio y su supuesto supervisor de las cajas piensa que todos somos ignorantes y que se pueden aprovechar de nosotros los comensales. El mencionado platillo era para la mesa de al lado de la mía y el pésimo mesero se equivocó, lo cual con mayor razón no es responsabilidad del comensal, pues amedrentándome tanto este supervisor de la caja y otra mesera diciendome groseramente: "Amor, si te lo traen y no lo pediste, lo pagas...", y esa fue su falacia de argumento que yo lo tenia que pagar, aunque el error no fue mio como comensal y obvio no lo ordene. Y lo peor fue la manera de responder pasivo agresiva de este mesera diciendome “Amor", cada que terminaba una oración, obvio de una manera condescendiente y despectiva, es decir ejerciendo micro violencias hacia mi tratando de justificar su falacia de argumento abusivo. Y el supuesto supervisor en cajas igual, tal para cual, alzaba la voz, no dejaba hablar y escalaba a agresividad verbal su insistencia de falacia de argumento que de nuevo va en contra del propio reglamento de la ciudad de México para estos establecimientos. ¡Donde más hemos visto eso... Ah si! En establecimientos que han hasta matado a comensales en esta ciudad por este tipo de situaciones y problemáticas. Y lo peor de todo es que el supuesto supervisor de la caja al final se quiso dar sus baños de grandeza moral al decirme que el iba a invitarme y a pagar por el platillo en cuestión. El Scary Witches ha muerto y no de una...

Está padrísima la temática!! Me habría encantado saber de su existencia mucho antes, pero nunca es tarde!! Fui con mis amigas y el ambiente está muy agradable para platicar y pasar un rato lindo. Considero que sí puede ser familiar si los niños son tranquilos y educados (el lugar es pequeño, no es para que anden corriendo o jugando por ahí); una de mis amigas llevó a su hija de 14 años y estuvo perfectamente bien. A mí me fascinaron la música, las decoraciones y todos los detalles góticos. Amé los vasos en forma de cráneo!! La comida es sabrosa y los precios me parecen accesibles. Entre la amiga que me invitó la comida y yo, ya con propina, gastamos alrededor, pero no más, de $500. En total fuimos 6 personas y la cuenta total rondó los $1,700 sin propina. La verdad comimos y bebimos a nuestras anchas, nadie se limitó y quedamos muy satisfechas en cantidad y calidad. Por último, pero para nada menos importante, el servicio fue MARAVILLOSO!! Nos trataron súper bien, las chicas son muy amables, atentas y siempre estuvieron al pendiente de nosotras. Definitivamente volveré, me quedé con ganas de visitarlo con mi esposo. Ojalá pudiera ir cada semana,...

El lugar es muy pequeño, bien decorado, música a volumen aceptable, variedad de bebidas buena y se agradece que tengan por ejemplo cerveza de chocolate. atención buena y amable. Lo que no me gustó es que la comida es demasiado simple, en realidad no hay comida salvo Hot dog y hamburguesa, tienen una pasta en carta pero no había, todo lo demás es botana (nachos, cacahuates, aceitunas, palitos de queso), los nachos pues son solo unos tostitos con queso amarillo encima y unas rajas en medio, la hamburguesa es super sencilla no esperes llenarte ni con dos, de los blody cacahuates esperaba algo más preparado pero solo era un plato con hotnuts, los palitos de queso me parecieron caros, 6 palitos muy delgados por $120. No esperes un deleite de comida, lamentablemente es x. Baños muy limpios, se hacen un poco bolas con las mesas, ambiente agradable, había varios chicos con vestimenta tipo gótica algunos rayando en cosplay, otros más con vestimenta normal por lo que no es necesario que de plano vayas todo vestido de negro o rockero o debas tener miedo de desentonar. Sinceramente todo estuvo bien pero por la comida no...