Muy mala experiencia...
Resumiéndolo diria "Decepción, comida básica, servicio justo y poco "integrado", y una intoxicación memorable"
Fuimos con mi pareja a por unas smash burgers, ya que somos bastante fans de este tipo de hamburguesas y nos gusta descubrir nuevos sitios cada semana.
Al llegar a este local, de entrada nos pareció bastante muerto. Local muy grande, vacío, 0 clientes y 3 empleados de los cuales solo el cocinero parecía estar trabajando. Eso sí, todo limpio, lo reconozco.
Después pregunté sobre las hamburguesas en catalán y la respuesta que recibí fue un "¿Cómo?" con tal actitud que me pareció que no había ninguna intención de esforzarse en entenderme. Sin más, habrá muchas opiniones sobre esto, pero quizas hay otras formas más educadas para decir a los clientes "Perdona, no te entendí".
Cambié al español (incluso me disculpé aunque sepa que no hay motivo por pedir perdon por hablar mi lengua en Barcelona), e hice mi pedido.
Mientras nos preparaban las burgers, mi pareja me comentó que la misma camarera que nos atendió y cobró, tocó el pan con las mismas manos con las que tocaba el dinero. Yo a estas cosas no le doy importancia, pero igual debería. (Y más viendo como terminamos).
Nos dan el pedido, y nos vamos a casa a cenar nuestras smash. Una vez las probamos, nos llevamos una decepción:
Concepto Smash Burger bastante simple en comparación a la mayoría de hamburgueserías smash de Barcelona. Nos pareció una hamburguesa muy básica, casi emulando las de McDonalds con ketchup y poco más.
Después de comer nos dijimos, "sin más, no volveremos" y seguimos con nuestras vidas...
Durante la noche, mi pareja empezó con dolor de barriga. A la mañana empecé yo también con dolor de barriga, y a mi pareja le dieron nauseas, vómitos y diarrea. Por la tarde yo estaba igual.
Un dia de baja los dos, y una muy mala experiencia. Sabemos que fueron las burgers porque no coincidimos nunca los mediodías y comemos cosas distintas. Lo único que compartimos ese día fue la cena, así que deducimos que algo estaba mal en las hamburguesas.
Evidentemente no volveremos, no solo por la intoxicación, sino por la calidad de las smahs y por la atención recibida. Espero que tomen medidas, quizás así acaben salvando el negocio, porque cada vez que lo vemos está vacío vacío. Quizás los motivos empiecen a hacerse evidentes...
Sea como sea, les deseo mucha suerte, y que los que vengan detrás tengan una experiencia diferente a la que nos tocó...
Read moreIt’s not worth it.
They are under staffed not enough workers so they make the food all together (8 different clients and 8 different burgers and fries) so they take the fries out and they sit on the counter until ALL the burgers are done. So the fries are cold, and the burgers have been sitting there on the bun for 5 mins. They then sauce them and top them all at once.
The bun is soggy from the burger so it falls apart.
Paper cups and not glass or even plastic for eat in.
And they even did the order wrong (salsa not in side) so they had to remake it.
Not a 1 star, but barely a 2. There are 30 better places for a smash burger...
Read moreEn la inauguración, pudimos probar toda la carta y la experiencia fue muy buena.
El local es moderno, minimalista, y repartido en dos plantas, barra abajo y comedor con mesas arriba.
La hamburguesa, la auténtica protagonista, es una doble cheeseburger estilo "smash burger" sensacional. Los dos discos de carne (Two Patties) que contiene están tan aplastados contra la plancha que el resultado es una hamburguesa crujiente, caramelizada y ligera. Una reacción que se conoce como efecto Maillard y sería como comerte un CD de "socarrat" cárnico. El queso es un queso cheddar estándar de cheeseburger y los daditos de cebolla cruda aportan algo de frescor. El pan estilo "bun" de brioche es esponjoso y suave. La adición de ketchup y mostaza es moderada, por lo que no resulta invasiva. En su género, una hamburguesa de 10. Eso sí, si vas con hambre te tendrás que comer dos.
A mí las patatas no me acabaron de convencer por ser más blandas que crujientes, pero crearon furor entre el resto de público asistente a la inauguración, especialmente las "Loaded Fried" que se sirven cubiertas por una mayonesa tuneada, tiras de bacon dorado y daditos de cebolla pochada.
Los postres son sencillos y cumplen su función.
El "Smashed brownie" es un brownie convertido en una cookie de grandes dimensiones, que se sirve caliente.
El "Smashed nutella" consiste en una generosa ración de nutella servida en un "bun" de hamburguesa pintado con mantequilla y planchado.
Two Patties es un local de visita obligada si os gustan las smash burger, y si no, pues es un buen lugar para inciarse en esta modalidad que está invadiendo la ciudad.
Además, los propietarios Miguel Puchol (Mantequerías Pirenaicas, L'Italiano Perso) y Gabri Rodrigo (ex-piloto de motociclismo) son muy majos y están rodeados de un equipo atento y eficiente.
Eso sí, ninguno de los dos es amigo de los pepinillos, así que sus...
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