Foster's Hollywood — Restaurant in Las Palmas de Gran Canaria

Justamente ayer puse una reseña con 4 estrellas que tuve que borrar hoy después de visitar el establecimiento. Recalcar que el establecimiento no estaba ni al 50% de su capacidad. En primer lugar llegamos y, después de sentar a la familia que iba delante nos dejan en la entrada y otro compañero tiene que indicarle con un gesto poco sutil que nos asigne asiento. Nos sentamos y tardamos aproximadamente 10 minutos en decidir la comida, tardando 20 minutos en venir a tomar la comanda. Para organizar el tiempo, tener en cuenta que llegamos a las 20:50 horas. Pedimos sobre las 21:15 horas (una hamburguesa y un costillar) a las 21:50 la mesa que llegó antes que nosotros ya estaba pagando la cuenta y nosotros aún sin ver nuestros platos. Pregunto si ha habido algún problema con la comida, ya que vamos por la segunda ronda de bebidas y nadie se ha acercado a decirnos nada sobre nuestra comanda mientras vemos que las demás mesas, aún llegando más tarde, ya comen. Al preguntar me responden “va por orden” a lo que respondo: “no creo, porque esa mesa entró con nosotros y están pagando” dejando al camarero un poco perdido. Veo que va a la cocina y comenta algo. Sale un camarero con dos hamburguesas a una mesa que llevaba 30 minutos sentada, al poco sale con nuestra comanda, (21:55h )en teoría. La hamburguesa no era la seleccionada, se le refiere y va a la mesa anterior a CAMBIAR la hamburguesa ¿qué te hace pensar que voy a comerme algo que ha estado delante de una persona extraña para mi? No se la cambian ya que han empezado a comer. Vuelve a cocina y refiere el fallo. A las 22:35 horas vuelve a salir otra hamburguesa muy hecha, recordamos que hemos pedido una poco hecha, con mala cara se la llevan. Decidimos decirle que nos llevamos la comida a casa, (si me iba solo comiendo el costillar iba a pagar lo mismo que esperando por la hamburguesa y el postre por el 2x1 en promoción), nos trae la hamburguesa y pedimos el postre para llevar también. Para cobrar sí vinieron ligeros, pero para disculparse o justificar lo sucedido nadie se personó.

No digo que no haya problemas en cocina y que se puedan despistar, eso lo entiendo porque somos humanos, pero que se pasen el paquete unos a otros y nadie pida disculpas? En fin, es un sitio al que suelo acudir con regularidad, pero no creo volver después de la...

¿SE PUEDE SER MÁS CUTRE? Fui con mi marido y mi hijo. Ellos pidieron una hamburguesa mientras que yo pedí una pasta. Al pedir, el camarero dijo que la pasta que quería estaba agotada. Yo, lo entendí (ya que era la pasta que más anunciaban) y pedí otra. Al pedir la otra, el camarero no presento ningún problema. 40 minutos después (si, cuarenta minutos para 2 hamburguesas y una simple pasta), trajeron las dos hamburguesas. No habían traído mi pasta aún.

A los 45 minutos de haber pedido, viene un chico y nos dice que no queda NINGÚN TIPO DE PASTA. Si nos lo hubieran dicho al pedir o a los 5 minutos de haber pedido, pero a los 45!? Eso combinado con que teníamos un hambre bestial. Vamos, que tenía que pedir otra cosa y esperar AÚN MÁS. Me acabe pidiendo una ensalada (encima, no tenían aguacate). Mi marido e hijo terminaron de comer, y yo aún esperando a que mi comida llegase. Después de que mis chicos hayan terminado de comer, vino un chico diferente a la mesa. El chico vino a decirme que la pasta que yo había pedido se acabó pero que tenían otro tipo de pasta. Así que acabé pidiendo esa pasta.

Claro, yo entendí de que al final la ensalada no se iba a hacer y que la pasta sí. Para estar seguros, mi marido fue a avisar al camarero al que pedí la ensalada. El camarero no presentó ningún problema (de nuevo). Tiempo después (ya me habían hecho esperar 1 hora), llegó mi pasta. Estaba buena, eso no lo voy a negar, pero con lo que me hicieron esperar, algo más de una hora, al menos podrían haber ofrecido algo para picar mientras esperaba a la comida. Por ejemplo, algo de pan.

Pero espera, que hay más. Más tarde, vino la ensalada que yo había dejado claro que NO QUERÍA al otro camarero. La camarera que me trajo muy amable lo entendió, pero vamos, me hicieron esperar cuarenta minutos para decirme que no hay de lo que yo quería, más lo que esperé a que me hicieran lo nuevo que pedí, añadido a que no entendieron mi pedido y me trajeron algo que no quería.

La cosa es que, esto no es algo que ha pasado hoy como caso puntual, sino que mi marido sufrió lo mismo la anterior vez que vinimos (hace unos pocos meses). Esto deja claro de que es algo que pasa a menudo y se debe de tomar acciones al respecto.

En fin, que la coordinación entre cocina y camareros es casi nula.

ME...

UNA DECEPCIÓN, UNA PENA, UNA OCASIÓN DE CELEBRACIÓN EMPAÑADA.

Empezaré por lo bueno: el personal, muy amable y simpático.

Hasta ahí lo positivo.

Hoy acudí al restaurante con mi familia para celebrar mi cumpleaños, y elegí específicamente un Foster’s porque tenían como novedad la HAMBURGUESA PASTRAMI (soy un incondicional de ese fiambre, qué le voy a hacer). Pedimos bebidas, un combo de entrantes (muy buenos, por cierto) y los platos principales… y VEINTICINCO MINUTOS DESPUÉS, la camarera que nos atendió vino a nuestra mesa a decirnos que, vaya por Dios, ¡no quedaba pastrami! Eso sí, si quería, podía pedirla sin pastrami, aunque al precio original; digamos que esto último lo entiendo a medias, porque si bien no pueden rectificar los precios de los platos, ¡no pueden cobrar un plato como lo que no es!

En resumidas cuentas, muy a mi pesar pedí una hamburguesa más normalita, aunque al mimo precio que la que quería, y acabé dejando la mitad de las patatas por culpa del nudo de indignación que tenía en el estómago.

Me levanté, acudí al baño y… a ver, una imagen vale más que mil palabras, adjunto mejor las fotos.

Acabaré con un comentario, una reflexión y una decisión personal: el comentario, mis disculpas a la persona que vino a cobrarnos, porque me desahogué con él y creo que no se lo merecía, pero confío en que haya elevado mi disgusto a su superior. La reflexión, ¿tanto hubiera costado tener una pequeña atención comercial, del estilo “mira, sé que te has disgustado…” (el propio camarero reconoció que me lo había notado en la cara) “… así que te invitamos a una cerveza extra, a un postre, a un ALGO…”, pero no sucedió... el camarero, muy compungido eso sí, al menos me felicitó el cumpleaños. La reflexión: seguramente les dará igual lo siguiente y último que voy a decir, porque clientes no creo que les falten, pero no cuenten con verme de nuevo en su establecimiento.

P.D.: Futuros clientes, preguntad si hay existencias de lo que queréis antes de pedir, y si acudís al aseo, hacedlo bajo vuestra cuenta y riesgo.

P.P.D.: Añado captura de la respuesta que me ha dado el dueño HACE UNA SEMANA (con calma, no te vayas a estresar, hombre)... muy personalizada, muy sentida, muy preocupado él. Sí, sí, se nota el sentimiento que le...