El Jardín del Virrey — Restaurant in Salamanca

Lo primero es aclarar que vine aquí porque estaba valorado con 4.7 en Google, 163 reseñas y sólo puedo decir, que no doy crédito! Hice una reserva que posteriormente tuve que rectificar y contacté a través de WhatsApp, que es una de las vías de contacto que tienen en la web, todavía estoy esperando a que lo lean... Cuando nos dieron la carta nos dicen que faltan cosas pero no nos aclaran qué y por supuesto cuando pedimos, una de las cosas que queríamos no la tenían. Pedimos una tabla de carne y nos dice la camarera que cojamos la pequeña que es muy abundante y cuál fue nuestra sorpresa cuando llegó y vemos una fuente de patatas fritas y unos trocitos de carne, para que no se diga que es una tabla de patatas... Pedimos después unas copas y vemos que una de ellas está sucia, lleno de pintura de labios el contorno. Lo único bueno, o no, es que la nuestra fue la única mesa ocupada de todo el local y que además de nuestra conversación lo único que se oía era a un guacamayo que hablaba... Una experiencia bastante surrealista y...

Esta un poco escondido, pero una vez dimos con el no hubo arrepentimiento posible. Desde la esmerada atención (vamos, que te tratan como a un virrey!) hasta las tostas que comimos, todo estuvo espectacular. Mención especial a las croquetas de pera y puerro, una tosta de salmón, tomate y queso de cabra (no recuerdo como la llaman) y a que te preparan el cóctel en tu mesa, cosa que es un espectáculo. Hemos vuelto y lo haremos muchas veces!

Hemos regresado a este lugar un montón de veces, y cada vez más a gusto. Atendidos por Vero, muy maja y siempre con una sonrisa y una buena recomendación para comer algo; o por don Alfredo, la verdad es que siempre salimos contentos y satisfechos. Además cada cierto tiempo tienen eventos con música o comidas temáticas, para no aburrirnos...

Fuimos a cenar porque tenía muy buenas reseñas pero fue una sorpresa. Había solo una camarera para 35 personas. No había carta, te decía de voz lo que había sin poder saber el precio de las cosas. A nosotros se le olvidó decirnos platos. En la web hay una carta pero después no es así. Tardó 45 minutos en llevarnos la bebida y 15 minutos más para el primer plato, croquetas y estaban frías. Otros 25 minutos después nos llevó la tabla de carne, que parte de ella también estaba fría, había pollo(sin sabor) 4 trozos de panceta con mucha grasa, chorizo, y otra carne(precio 20e),nos pareció caro para lo que entraba y sin calidad. Pedimos pan pero no llegó. Había un señor por ahí dando vueltas que no ayudó a la camarera y la pobre no daba para más. El local es bonito pero el...