Espumosos 5M — Restaurant in Zaragoza

Los modales de algun jefe de comedor lejos de resultar los adecuados. -¡Chato! Cuando uno tiene una mala tarde lo mas acertado es quedarse en casita. La comunicacion entre salones podria decirse nula, por no decir inexistente, reservar y no aparecer en el libro todo uno, por que no es posible que una señorita nos reciba llamando por su nombre a la reserva y que al bajar al comedor inferior no les suene de nada, cuando menos chocante la situacion. La batalla entre los veteranos puso en una situacion penosa a alguno de los camareros mas jovenes al cual pude observar que muy diligentemente el muchacho atendia las comandas apesar de que un veterano le decia blanco y el otro le contrariaba en negro. Mencion especial,eso si para una señorita de cabello multicolor (desconozco su nombre) cuya atencion fue dadas las circunstancias de sobresaliente, rapida eficaz y con una sonrisa en los labios. Lo de la comida... Eso va a ser complicado de catalogar. Hamburguesa Espumosos...lo peor que he visty probado en hamburguesas, no se a que viene el sobre nombre de espumosos, corrientita, corrientita, a no ser claro esta que abrasar el pan al punto de carbonilla sea una nueva tendencia gastronomica, y llamar pan a ese bollo industrial es mucha generosidad por mi parte. Un mediocre bocadillo de pota rebozadaque no sabia de la sal ni por recuerdos soso es mucho decir insipido anodino sin sustancia, gracias a la ya mencionada señorita de cabello peculiar la salsa de tabasco que nos facilito pudo añadir algo de sabor a aquella amalgama. Plato combinado de entremeses. -¡Uf! Lo de este plato fue algo digno de estudio. Compuesto de ensaladilla rusa de un sospechoso tono grisaceo Algo que pretendia ser una croqueta cuadrada para mas originalidad bechamel excesivamente harinada y un toquecito de algun tipo de pescado quien dice bacalao dice siluro o barbo a saber Gambas a la gabardina... Permitanme la sonora carcajada. Que no por defecto si no por exceso camiseta termica polo de cuello de cisne jersey de punto abrigo de lana guarda polvo y la ya mencinoada gabardina. El rebozado se les recomienda esponjoso NO MASA DE PAN cuando se me antoje un bocadillo de gambas descuiden que asi lo solicitare. Para completar el platito uno trozos de pota rebozados de la misma masa madre que sus compañeras las gambas. Dieciseis horas y varios antiacidos despues continuo intentando digerir el menu, En resumen jovenes camareros con mas paciencia que experiencia situados entre dos responsables de comedor enfrascados en una medicion de genitales unos cocineros desastrosos y una comida indigna de sr llamada de semejante forma nos dieron la noche. Gracias por una experiencia...

Pongo una estrella por que no puedo poner cero. Entramos a merendar 5 jóvenes en silla de ruedas con 6 padres como acompañantes. Les dijimos cuantos eramos y que ibamos con las sillas y nos dijeron q pasasemos. Ponen dos mesas pequeñitas y ninguna silla para los acompañantes. Somos 11 personas. Decimos que por favor nos pongan alguna silla para sentarnos. El camarero me dice con malos modos "total para lo que van a tomar" A lo que contesto que él no sabe que vamos a tomar. Que aún no hemos pedido. Que venimos a merendar porque es el cumpleaños de uno de nuestros chicos. Me temo que supuso que como tenían discapacidad ni comen ni beben. (Sorpresa! Las personas con discapacidad tienen la costumbre de comer y beber. Y lo hacen todos los días) . El camarero me dice que lo estamos fastidiando, que lo tiene todo reservado para cenar. Son las seis y media de la tarde y el local está practicamente vacio. Los pocos clientes que hay están tomando un café o una bebida, sin comer. Pero todos tienen una silla para sentarse y hay como cincuenta vacias en el local. Sobre las mesas no hay ningún cartel de reservado. Le digo que si podemos traer una tarta y me dice que ni de broma. Que tienen algún trozo pero no es para nosotros. Es para la gente que va a comer. Gente que desde luego no está en el local. Pedimos un refresco y nos lo tomamos corriendo porque el camarero nos miraba bastante mal. No se que tiene este señor contra las personas con discapacidad. Son adultos que estuvieron tranquilos sin hacer ruido ni molestar. Nunca nos habían tratado tan mal y eso que llevamos 22 años conviviendo y tratando con personas con discapacidad. Moviendonos por cafeterías, restaurantes, cines, teatros, salas de conciertos, museos, medios de transporte, hoteles... Intentando que nuestros hijos lleven la vida más normal posible. Esto no ha sido un mal servicio. Ha sido un trato discriminatorio y ofensivo a unos clientes por su aspecto y por su discapacidad. No volveremos nunca a los espumosos de la calle Cinco de Marzo. Es más, lo siguiente que voy a hacer es poner una reclamación en el...

Otro de esos sitios infames del centro de Zaragoza. Menú de Semana Santa 19 de abril de 2025. 27€ Reservamos el para comer el día anterior, el lugar se veía bastante lleno ...aunque cuando la camarera me dijo que no hacía falta reservar que seguro que habría sitio, debí haber sospechado algo. Evidentemente el local era más grande de lo que parecía y tenía un gran comedor en el sótano. La decoración el ambiente y la limpieza ni fu ni fa. La comida mala y escasa: De primero pedimos alcachofas salteadas con gambas y ajetes tiernos: alcachofas de lata con ese tacto pastoso y sabor ácido, las gambas de tamaño gusanito, los ajetes tiernos habían huido. De segundo pedimos costillas de ternasco, cuatro mini-costillitas increíblemente duras, si no fuera por el tamaño hubiera jurado que eran de ovejo. Cuesta imaginar dónde se pudieron proveer de un género de tan pésima calidad. Todo ello con un vino Coto de Hayas / Roble, de denominación de origen Campo de Borja, año 2023, uvas Tempranillo y Cabernet Sauvignon, al menos esa era la botella, lo digo porque los vinos Campo de Borja suelen ser de bastante más calidad que el que nos sirvieron, que más bien parecía un simple tempranillo flojo con un ligero sabor a roble. De postre conseguimos pedir torrijas caseras. Digo conseguimos, porque el camarero se empeñaba con todas las mesas en que pidieran piña natural y cuando nos dejó por imposibles todavía oímos a su compañero recriminarle diciéndole que él nos habría colocado la piña. De todas maneras no sé si fue un triunfo o un fracaso, la torrija era de lo peor que se puede esperar, y para colmo adornada con un buen chorro de salsa de...