La famosa Casa del Lago en el Lago de Chapultepec es hoy el Centro Cultural Juan José Arreola. Uno de los Centros Culturales de más alto perfil que opera la Universidad Nacional Autónoma (UNAM), el cual tiene como objetivo incentivar y promover la creatividad y la colaboración artística.
Los programas incluyen música, teatro, danza, cine, literatura y artes visuales. La Casa del Lago también ofrece un espacio de reflexión sobre temas de actualidad y formación. Convertido en Centro Cultural en 1959, abrió sus puertas como parte de la UNAM en ese momento.
La historia de la casa comienza en 1906 con un proyecto mucho más grandioso para rejuvenecer gran parte del Parque Chapultepec. Estos planes incluyeron trabajos para crear los lagos y mejorar el paisaje en todas partes. Todo el trabajo se realizó en preparación para las celebraciones del centenario que se celebrarán en 1910.
El edificio se inició como sede del Club Automovilístico de la época. Inaugurado oficialmente en 1908, en 1910 las celebraciones del centenario ya se sentían y veían como algo serio. Se había ganado la independencia, pero aún estaba por llegar una guerra revolucionaria.
El recién electo presidente, Francisco I. Madero, se hizo cargo de la propiedad como parte del Gobierno Federal. El Club Automovilístico siguió alquilándolo y cuidando los jardines circundantes. Sin embargo, para 1915, el club se había retirado de su parte del contrato y la propiedad fue nuevamente administrada por el gobierno. Desafortunadamente, no fue hasta 1916 que se establecería la Dirección y Administración del Parque.
En 1919, el primer presidente posrevolucionario, Venustiano Carranza, utilizó el antiguo Club Automovilístico como sede del cumpleaños número 15 de su hija. Durante la década de 1920, el edificio fue brevemente la residencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público. De hecho, se mudó y usó la casa como su hogar privado. Para 1929, el área de Estudios Biológicos, entonces dependiente del Ministerio de Agricultura y Fomento, se estableció en la Casa del Lago. Este departamento pasó a formar parte de la UNAM en 1930.
Cuando casi toda la UNAM se trasladó a Ciudad Universitaria en 1953, la Casa del Lago volvió a quedar desocupada. Así permaneció hasta 1959. En septiembre de ese año volvió a abrir, esta vez con una exposición de pintura, un espectáculo de danza y el escritor, Juan José Arreola, su primer...
Read moreOriginalmente, la construcción recibió el nombre de "Casa del Lago y Mirador". Fue diseñada por los arquitectos Carlos Lazo y Antonio Muñoz, con un estilo arquitectónico de influencia neoclásica. La idea era que la Casa del Lago se convirtiera en un espacio de esparcimiento y contemplación para los visitantes del Bosque de Chapultepec.
Durante sus primeros años, la Casa del Lago albergó un restaurante y un mirador desde el cual se podía disfrutar de hermosas vistas del lago y del bosque. Sin embargo, a lo largo de su historia, el edificio ha tenido diversos usos y ha experimentado varias transformaciones.
En la década de 1960, la Casa del Lago fue remodelada y adaptada como sede del Departamento de Difusión Cultural de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). A partir de entonces, se convirtió en un importante centro cultural, dedicado a la promoción y difusión de actividades artísticas y académicas.
Hoy en día, la Casa del Lago de Chapultepec es conocida por albergar exposiciones de arte contemporáneo, conciertos, obras de teatro, conferencias y otras actividades culturales. Su programación es diversa y abarca diferentes disciplinas artísticas, atrayendo a visitantes locales y extranjeros.
La ubicación privilegiada de la Casa del Lago, rodeada de naturaleza y con vistas panorámicas al lago, la convierte en un espacio único en la Ciudad de México. Es un lugar muy apreciado por los amantes del arte y la cultura, y sigue siendo uno de los destinos más populares dentro del Bosque de...
Read moreLlevo a mis hijos dos veces al mes vamos a remar,a la tirolesa, al zoológico, etc. Algo que no me gusta es la atención en las áreas de comida, ayer martes 26 de julio asistimos por el carrusel a las áreas de comida, se acercan varias personas para ofrecer sus comidas, nos quedamos en un puesto, nos mostraron el menú, yo pedí comida corrida, mis hijos aburguesa, al traer lo mío, es un plato para niños con una porción de sopa de fideos que pensé que era para mis nenes, pero no, ésta era para mí, le reclamé al mesero y solo dijo, " ésa es su porción" además estaba fría, pedí una pechuga asada sin grasa, en la imagen del menú se ve con pepino jitomate lechuga limón, así la pedí y que me la sirvieran con frijoles, cuando me sirven me dan el plato solo con la pechuga y los frijoles, al momento reclamé y pedí me lo cambiaran, lo pedí de esa forma porque yo no puedo comer grasas, ni queso ni crema y me traen frijoles con queso, espagueti con crema que yo no pedí, las tortillas además fueron calentadas en horno de microondas estában tiesas y resecas y frías por todo eso reclamé y sólo pidieron disculpas, y la cuenta fue de $ 320.00 pesos, varias veces no ha pasado esto con situaciones similares y cuando reclamas se...
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