Puerta de las Granadas — Attraction in Granada

The Puerta de las Granadas is a beautiful and historic gateway that sets the tone perfectly for a visit to the Alhambra. As we walked up from the city, this elegant stone archway felt like stepping into another time, marking the start of the scenic path through the lush woods leading to the palaces. 🌳✨

The surroundings are peaceful and shaded, making it a lovely walk, especially on a warm day. The gate itself, with its classic design and carvings, is simple yet majestic and makes for great photos before heading further up to the Alhambra. 📸

It’s not just an entrance, but a symbolic beginning to the journey, blending history, nature, and a sense of anticipation for the wonders that await. A must-see if you enjoy exploring Granada on foot and soaking up its timeless...

Cuando subimos desde Plaza Nueva hacia la Alhambra, por la cuesta de Gomérez, el primer elemento que nos indica que nos estamos adentrando en uno de los monumentos más visitados de España, es La Puerta de Las Granadas.

La Puerta de Las Granadas se construyó en el siglo XVI a modo de arco triunfal romano, es de estilo renacentista, mandado a edificar por el emperador Carlos V. Se encuentra junto al Palacio de los Marqueses de Cartagena.

El tímpano de las puertas presenta el escudo Imperial, con las figuras alegóricas de la Paz y la Abundancia sujetando su coronación. Bajo el escudo se encuentra un arco semicircular, soportado por columnas toscanas. Todo el conjunto esta labrado en piedra con aparejo almohadillado.

Esta puerta que nos introduce en el Bosque de la Alhambra, y en lo que fue el valle de la al-Sabika, se construyó sobre otra puerta árabe, la Bib Handac o puerta del Foso, cuyos restos pueden verse al lado derecho.

DETALLE - PUERTA DE LAS GRANADAS

El nombre de “Puerta de Las Granadas” viene de las tres granadas que decoran su frontón.

A principios del siglo XX se colocó una cartela, en el lateral derecho de la cara posterior, de la Puerta de las Granadas. En ella, se pueden leer las siguientes palabras, del poeta almeriense, Francisco Villaespesa:

“A Alahmar, el varón más insigne de la Casa de NASAR, fundador de la Alhambra. Porque sobrepujaste los límites del Tiempo y del espacio, haciendo palidecer todas las bellezas de la Naturaleza, al crear las maravillas de este Alcázar, para ceñir de gloria y de inmortalidad las divinas sienes de la Ciudad inconfundible y Única, recibe el homenaje conmovido de Granada y con él la admiración y respeto del Mundo, y el llanto de tus hijos desterrados que, aún en las soledades del desierto, a la luz de las estrellas, sueñan con el Paraíso de tus estancias encantadas.

No temas las injurias del Tiempo ni las veleidades de la Fortuna, porque tu ardor desmesurado se eternizó en el portento de estos recintos.

Podrán quedar ni aún las sombras de estos muros, pero su recuerdo, será siempre imperecedero, como único refugio posible del ensueño y del Arte.

Y entonces el último ruiseñor que aliente sobre el Mundo fabricará su nido y entonará sus cánticos, como una despedida, entre las ruinas gloriosas de la Alhambra.

F....

contemplando La Puerta de Las Granadas, llamada así por las tres granadas de fruta que tiene en la parte superior. En un principio había una puerta en la muralla defensiva construida por los árabes que daba paso rápido a la Alcazaba, que está casi encima verticalmente. Luego Carlos I de España y V de Alemania encargó esta puerta nueva a Pedro Machuca, que también construyó el Palacio de Carlos V dentro de La Alhambra en el mismo estilo renacentista de piedra almohadillada que venía de Italia. Como podéis ver, la puerta tiene tres vanos, el central más grande para carruajes, y los laterales para personas. Hasta hace poco tiempo circulaban todo tipo de vehículos hasta que se prohibió excepto a los públicos como el tren turístico que sube y baja turistas pero que no hemos utilizado. Está recién restaurada por lo que la hemos visto en todo su esplendor después de que la limpiaran de la contaminación y del paso de los años, y así reluce su piedra blanquecina. Al cruzar la puerta se me acercó una mujer de aspecto gitano con dos ramitas de romero para pedirme 5 € por ellas. Estaban como recién cortadas, quién sabe si de los mismos jardines que íbamos a atravesar, pero le di un euro, y ante su insistencia le dije que se lo regalaba con las ramitas también. Aceptó las monedas y se fue a engañar a otros incautos. Estábamos entrando en los jardines que rodean La Alhambra llenos de árboles frondosos y exuberante vegetación que daban buena sombra en este inicio de la calurosa primavera granadina. El sonido del agua bajando por las acequias laterales del camino hacía apagar el murmullo de la gente con sus comentarios y el sonido de los dispositivos electrónicos de los que intentábamos plasmar esta belleza creada por el hombre y la Naturaleza.

Es una fuente decorativa con surtidores en tres alturas, y que representa la fuerza y el poder del emperador, además también servía de abrevadero para la caballería. Justo encima de este monumento vimos al doblar una curva a la izquierda la Puerta de la Justicia, que es un acceso a La Alhambra pero no la entrada principal que andábamos buscando para conseguir las entradas oficiales e ingresar en el...