Selma — Restaurant in Bogota, Capital District

Fuimos con mucha expectativa, pero salimos muy desilusionados. Aquí van las razones de esta calificación. Comida: Pedimos dos cócteles sin alcohol que estaban súper pasados de dulce. Un mocktail no es cualquier cosa, requiere que, en efecto, sientas el sabor a cóctel, no una bebida llena de syrup con par de cosas “novedosas”. Nos tocó echarles mucha agua para que fueran pasables. Hummus verde. Como el hummus venía con perejil y a mí no me gusta mucho, no puedo ser objetiva al respecto. Sin embargo, el hummus viene con un pan que estaba súper salado y uno de ellos estaba pasado de grasa. Rosti de papa. Increíble. Estuvo delicioso y nos ilusionó con que los platos fuertes serían mejores. Fideuá. Estaba mal hecha, es decir, si te venden una fideuá a ese precio, te voy a exigir que técnicamente esté bien preparada, pero ese no fue el caso. Además, oh sorpresa, estaba saladísima. Claramente el chef encargado no había probado el mise en place, porque la pasta estaba salada y encima venían cristales de sal. De forma paradójica, los chipirones no sabían a nada. Este plato lo devolvimos porque nos pareció el colmo. Chuletón de cerdo. Nos pareció increíble que con tremendo horno para hacer carnes a la parrilla nos sirvieran una carne que tenía partes pasadas de cocción. Claro, el ahumado es increíble para este tipo de platos, pero ya había partes de la cubierta que sabían era a quemado. Y, nada nuevo, la salsa, que te dicen que es un demi-glace, pero que estaba mal hecha, también estaba pasada de sal. Un punto menos es que los mismos tallos que colocan en el chuletón los ponen en el fideuá. Entonces te comes dos cosas con una parte de sabor igual. La recomendación sería no repetir. Servicio: Las meseras que nos atendieron fueron increíbles. Es por el buen servicio que no coloco una calificación más baja. Sin embargo, había un tipo, cuyo rol no terminé de entender, que parecía ser jefe de algo, sí era muy grosero. Como las mesas no tienen mucho espacio entre ellas, al lado de nosotros se sentó una mesa grande que que importante, porque hasta Álvaro Clavijo pasó a saludarlos, alguien le pidió a este señor creo que la clave del wi-fi, y como era imposible que la persona desconectara un segundo su celular de la corriente eléctrica, a este sujeto le pareció buenísima idea meterse en el pequeño espacio que había entre las dos meses y literalmente ponerme su cola en la cara. Después de esto, la mesera estaba en mi mesa hablando con nosotros y este señor súper grosero la interrumpió para hablarle y ella tuvo que dejarnos hablando solos.

Dirán que soy quisquillosa, pero es que el valor de los platos da para exigir una alta calidad en la cocina y en el servicio. En Chapinero hay otros restaurantes mucho más ricos con menores precios.

Inicialmente les había puesto 3 estrellas, pero acabo de ver fotos de los platos que nos comimos, tomadas por otras personas y publicadas aquí, y es el COLMO. Terminé de comprobar que nos dieron platos hasta irrespetuosos. En otras fotos se ve bien la cocción del chuletón y con otros ingrediente encima. Igual con la fideuá, en donde se ve qué hay hierbas encima y los chipirones parecen asados. Si revisan mis opiniones, siempre reconozco cuando algo es bueno, y en este caso de verdad que les recomiendo que nunca vayan a este sitio. Es tremenda estafa. Menos mal que devolvimos un plato, a pesar de que deberíamos hacer devuelto todo menos el rosti de papa. Estoy...

There is no control or organization in the serving of the orders. We were in a group of 8 people. I ordered entrées and everyone ordered drinks and main dishes. Both my entrées did not come. Drinks took too long to be served. The waiter asked if all orders had arrived, then I cancelled my entrées because all main dishes had already arrived, and I ordered a pasta w/ lobster which arrived much later than everybody else's dish. The pasta was raw, the sauce was horrible, and the lobster as so far from fresh that the smell was overwhelming from 2 feet away. I informed the waiter, they took my order away "for review", but I got no response. We asked for the check, and someone just came to the table and told me that they wouldn't charge me for my dish. Never going back, and I very strongly recommend against wasting you time and money on this place. Absolutely...

Mi experiencia en Selma fue una mezcla de emociones. Fuimos un martes a las 6:30 pm, en un día lluvioso, celebrando nuestro aniversario con mi esposo y dos hijos pequeños. El ambiente, el servicio y ciertos platos nos encantaron, pero hubo otros detalles que no lograron cumplir nuestras expectativas.

Lo que pedimos para compartir:

Hummus con cola de res confitada, pepino y perejil: El sabor de la carne fue espectacular, tierno y jugoso, y el hummus acompañado de pan pitta estaba muy rico .

Ensalada César con lechuga romana, crocante de papa, parmesano y aderezo César: A mí me gustó mucho, con el balance justo de sabores, pero a mi esposo no le convenció, ya que encontró el sabor del aderezo y el queso un poco fuerte.

Pollo a la brasa: Aunque el sabor estaba bien logrado, nos pareció que el pollo estaba demasiado tierno para nuestro gusto; preferimos un punto de asado más crujiente. Las alitas apenas tenían carne, lo cual fue un poco decepcionante.

Lomo a la parrilla con salsa de pimienta verde y papas fritas con bernaise: Muy buen sabor y las papas estaban espectaculares —crujientes y bien sazonadas—. Sin embargo, el lomo llegó undercooked a pesar de que lo pedimos en término 3/4, y la salsa bernaise no me gusto mucho.

Rösti de papa: Mi favorito de la noche. Pedimos el Rösti con salmón y fue un verdadero highlight. La frescura del salmón, combinada con el crujiente de la papa, fue excepcional. Volvería solo por este plato.

Lo que me gustó:

Servicio: El servicio fue excelente. Andrés, nuestro mesero, hizo nuestra noche especial al cuidar cada detalle y asegurarse de que estuviéramos cómodos. Al saber que era nuestro aniversario, nos dieron de cortesía una tarta de caramelo, lo cual fue un muy buen gesto.

La decoración y ambientación son muy bien curados y de buen gusto. La música es agradable y el ambiente es acogedor. La cocina es abierta y se siente el lugar como una finca moderna donde con familia y amigos cercanos se va a comer. Muy buen vibe.

Lo que no me gustó:

Opciones de bebidas:No hay opciones de bebidas sin azúcar aparte del agua, lo cual limita un poco las alternativas para quienes prefieren evitar el azúcar.

Disponibilidad de postres:Llegué con muchas ganas de probar el pie de limón que aparece en el menú online. Sin embargo, al final de la comida nos informaron que ya no estaba disponible debido a un cambio en el menú, lo cual fue una pequeña decepción. Iba casi que exclusivamente a Selma por el Pie. -No es...