Starter olives were the worst I had in Spain so far Wine glasses were greasy & and the wine warm (not pleasent room temp, rather room with no ventilation in mid august at siesta time temp) Pizza was okay - the dough was actually good but the rest of the ingredients weren't the best; the bufala was really soggy Service was terrible, and I mean terrible: the waitress was chewing gum & minding her phone; initially we asked for a table inside and she said they were reserved but minutes later two girls asked the same and they moved a table in for them, from the outside terrace (well thanks); When I asked for salt she actually brought a jar with the salt, I was expecting the whole thing, salt, pepper and whatever else people put on their pizza
I was really disappointed because I expected much more seeing all the good looking pizzas in the reviews, but the looks is...
Read moreUn día normal de trabajo, dispones de una promoción de Oferplan. Se trata de comida italiana. Aparentemente algo normal, algo cotidiano... Comer para estar vivos.
Nada más llegar, un local pequeño y coqueto y con cierto encanto, que te sorprende porque a pesar de no ser grande, está abarrotado, es bullicioso y está vivo... Al fondo tras el mostrador se divisa el horno.
Una chiquita maravillosa de voz dulce, enseguida te atiende con una amabilidad especial. Ella es Valentina y no es italiana. Empiezas a comprender que no estás en un sitio corriente, empiezas a pensar que es tu día de suerte. Pues no solo es amable, es muy profesional y con un sexto sentido, adivina las preferencias de los clientes. Te transmite gustos y sabores cuando te describe las distintas elecciones que tienes a tu disposición. Tú sólo tienes que decir: ese.
Tras la comanda, un servicio ágil y rápido. A saber, no sean ilusos, se trata de comida auténtica y artesanal, no de cosas de franquicia prefabricadas. Obviamente tarda un poco en venir el antipasti. Pero, non troppo.
Cuando pruebas la comida, dos palabras saltan de tu paladar al cerebro: AUTÉNTICO Y SABOR.
Por no hablar de cantidad, calidad, presentación y lo bien hecho.
Pero sobre todo: AUTÉNTICO Y SABOR... Porque no, no es un italiano más en Málaga, es UN ITALIANO EN MAYÚSCULAS. Como un profano cree que debe ser una casa de comidas, donde comen los italianos. Donde la pasta, la masa, el queso, la albahaca y el pesto, las cosas sencillas, tienen una textura, un tacto y un sabor especial.
A los postres, Valentina se decanta por los fritelle de nutella y pistacho. A mí vista de ignorante, son unos profiteroles al estilo italiano. Valentina se encarga de sacarme de dudas y de mostrar lo equivocado que estoy. Y aunque lo recuerda, se trata de otro postre... Que sin duda, tienes que probar, porque va a ir directo a tu paladar.
Por todo ello..., NIENTE MALE (nada mal), reservar en este establecimiento de Pasaje Esperanto de Málaga. Un nuevo acierto promocional de Oferplan. Qué de seguro no te va a defraudar y repetirás.
Por cierto, disfruta tras los postres del auténtico y artesanal chupito de limoncello que te ofrecen. Es la culminación de una gran comida.
Hay lugares con encanto, y tú has tenido la suerte de comer en uno de ellos. Por cierto, creo que el dueño se llama Nico, y si...
Read moreQuería probar otra pizzería en lugar de ir a las conocidas. Las fotos de las reseñas me acordaban el estilo de pizza que me suele gustar entonces he decidido averiguar.
El local se ubica ligeramente fuera de las calles principales pero se puede ir tranquilamente andando. La plaza donde está es muy oscura; además la pizzería, a pesar de tener muchas mesas afuera, no ha puesto ningún tipo de iluminación. No podía leer el menú y de hecho mis fotos sin flash han salido muy dark. Estéticamente muy pobre y sin identidad propia: las sombrillas, las sillas y las mesas son las patrocinadas por la marca de la cerveza. Este estilo de cosas nunca me han gustado porque los locales se vuelven todos iguales y estándares.
El interior no es muy diferente.
El personal respeta mediamente las medidas de seguridad; en el interior los he visto con mascarilla pero el mismo hombre que prepara las pizzas, sin delantal ni nada, sale fuera a tomar nota de las comandas y a llevar los platos.
El personal es italiano; cordial y abierto a comentarios.
El menú no es muy variado y algunos ingredientes faltaban al pedirlos. No he apreciado el hecho que, a pesar de que la descripción pusiese escamas de parmesano, al final fuese parmesano rallado. A lo mejor ha sido un misunderstanding. Pero hay que reconocer la posibilidad de añadir o cambiar ingredientes con respeto a los ya combinados del menú.
La patatas fritas sobre la pizza estaban ricas pero eran muy pocas; habría puesto un un pelín más. La masa no tenia mucho sabor pero no he tenido problemas de pesadez de estómago.
Precio medio pero lo habría bajado ligeramente considerando la zona y la...
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