Descaro Restaurante — Restaurant in Madrid

El 15 de diciembre tuve la peor experiencia en un restaurante en Madrid. Son unos descarados e insultan al cliente tras cobrar mal y no querer hacer el abono. Y eso después de un servicio bastante malo. Tras la comida (raciones enanas, huevos benedictinos fríos, tostas para untar sin que legase la mermelada... un desastre

Fui a la barra y al rato llega la misma camarera, a la que le pido que me cobre «uno de esa mesa», pero la pobre mujer, que me dio la sensación de ser nueva, se equivocó y me cobró la totalidad de la mesa, más de 200 euros que pagué casi sin fijarme por las prisas. Cuando me percaté del error, se lo dije para que me hiciera un reintegro y me lo cobrara bien y me dijo «¿y no pueden hacerte un bizum?». No, lo siento, no pueden. Necesito un abono, me has creado un problema y no puedo pedirle a la gente de la mesa que me lo solucione. Si el restaurante genera un problema, la solución tiene que venir de parte del restaurante.

La chica no sabía hacerlo así que llamó a un chico que tenía un chaleco. En El Descaro llevar un chaleco te convierte en encargado, porque lo de tener mano izquierda o respeto por los clientes desde luego que no.

Este supuesto encargado empezó como a darme largas para cancelar el abono y a decir que yo tenía que ser más empático con el error de la chica y ya ahí me puse nervioso y le dije, es verdad que algo alterado «yo no tengo que tener respeto por ningún error, y no eches la culpa a tu compañera, no es un error de ella, es un error del equipo así que deja de darme largas y hazme el abono ya, porque tengo prisa por irme«.

El hombre va y se pone brabucón y comienza a discutir conmigo hasta que levanté la voz y le dije que me hiciera el abono inmediatamente. Cuando por fin lo hace me lo da con desprecio a lo que le di las gracias también con visible mal humor.

Volví a mi mesa sin que el encargado me viera y cuando salí, escuché que me estaba insultando y llamándome maleducado, así que le contesté desde la puerta diciendo que le había escuchado y que así no se podía tratar a los clientes y que me sentía estafado por el mal servicio y el trato recibido. No volveré, no vayáis.

Obviamente yo me alteré y no estuve a la altura de las circunstancias, pero el comportamiento de ese señor sí que fue lo peor es esa experiencia. Como profesional, no debería haberme puesto problemas para hacer el abono ni haberme vacilado para sacar lo peor de mí. Su trato ha sido totalmente nefasto, peor que la vulgaridad de poner la botella del revés en...

The name "Descaro" – Spanish for "audacity" – proves ironically fitting for this Madrid establishment, where incompetence meets intimidation in spectacular fashion.

Our group of six had a truly awful experience. The food was terrible - the patatas bravas (spicy potatoes) were barely edible, and they somehow managed to serve a paella that was burnt on the outside but raw in the middle.

But the real problems came from the staff. After misleading us about our pre-paid drinks package, one particularly aggressive waiter moved beyond simple dishonesty to actual threats, waving a wine bottle at our table in a menacing way. In all my years reviewing restaurants, I've never felt so unsafe that I considered phoning the police.

To make matters worse, there wasn't a manager in sight during this shocking display of aggression. This restaurant seems determined to set new lows in customer service.

Final Verdict: 0/5 stars Advice: Stay well away from Descaro.​​​​​​​​​​​​​​​​

El nombre "Descaro" resulta irónicamente apropiado para este establecimiento madrileño, donde la incompetencia se une a la intimidación de manera espectacular.

Nuestro grupo de seis personas tuvo una experiencia verdaderamente lamentable. La comida fue pésima - las patatas bravas estaban prácticamente incomestibles, y lograron servir una paella que desafiaba la lógica: quemada por fuera pero cruda por dentro.

Pero los verdaderos problemas vinieron del personal. Después de engañarnos sobre nuestro paquete de bebidas prepagado, un camarero particularmente agresivo pasó de la simple deshonestidad a las amenazas directas, blandiendo una botella de vino de manera amenazante hacia nuestra mesa. En todos mis años como crítico gastronómico, nunca me había sentido tan inseguro como para considerar llamar a la policía.

Para empeorar las cosas, no había ningún encargado presente durante esta impactante muestra de agresividad. Este restaurante parece empeñado en establecer nuevos mínimos en atención al cliente.

Veredicto Final: 0/5 estrellas Consejo: Ni se acerquen al Descaro. Madrid tiene cientos de restaurantes excelentes - elijan...

Elegimos Descaro para probar su cocido madrileño después de haberlo conocido por el programa Batalla de Restaurantes de Alberto Chicote. No sé exactamente en qué lugar de los cuatro quedó , pero desde luego no ganó el concurso al Mejor Cocido de Madrid. Aún así, esperábamos que habiendo salido en el programa de tv y competido, su cocido sería de cierta altura gastronómica . Pues nada más lejos de la realidad. Cocido muy normalito, escaso, con poco sabor en general y demasiado frío . Compensó porque estuvo muy rica la sopa. Bien el trocito de morcilla de Burgos, pero el chorizo con sabor a nada, ningún trozo de tocino , ninguna integración de sabores, cada cosa por su lado, los garbanzos de bote mezclando unos minúsculos con otros pequeños y cierto sabor desagradable a enlatado, y a la escasa verdura no se le puede pedir mucho más . Insisto que la sopa vendría de otro cocido porque nada tenía que ver con todo el resto . El precio para un domingo, 27€ sin incluir la bebida . Un menú cocido muy a lo turístico y “enlatado”. Realmente , cuando un mismo plato se hace los 365 días del año quizás no le pones el mismo empeño que al principio , podría ser que se van usando los sobrantes de días anteriores , añadiendo de aquí y de allá y te van resultando distintos cocidos a lo largo de la semana en función de todo lo anterior. La verdad es que no cumplió para nada nuestras expectativas , las cuales no eran tan altas dado que se trata de un lugar más propio de turistas que otra cosa, Plaza España de Madrid, pero sabiendo que había competido en el programa de tv mencionado, deberían haber pensado que con tal publicidad, mucha gente como nosotros iría a probarlo y deberían estar a la altura, pero lamentablemente no fue así .No suelo poner apenas reseñas salvo que tenga una experiencia o muy buena, o muy mala o no haya respondido a unas mínimas expectativas que llevase antes de entrar al local , y en este caso ha sido por esta última razón. Por último, el personal amable y el...