El Ingrediente — Restaurant in Madrid

Acudí a Restaurante El Ingrediente sin pensarmelo mucho. De la Tarta de Queso me habían hablado muy bien y la Carta me había parecido arriesgada, con toques fusión que podrían estar muy bien logrados o ser un completo desastre. Quien no arriesga no gana, por lo que me animé.

El Ingrediente se encuentra entre las calles de la zona Rios Rosas y Cuatro Caminos. El local, de pequeñas dimensiones, tiene dos alturas cercanas entre sí con contacto visual. En la inferior, vista a la barra (donde parece elaboran algunos platos) y el acceso a la cocina.

La Carta tendrá sus amantes y sus detractores. En El Ingrediente huyen de los platos de siempre y apuestan por fusionar cocinas con su propia identidad. Hay opciones que me parecen muy interesantes y otras no me llaman nada de nada. No obstante no sería la primera vez que pasa que pides algo que te atrae mucho de primeras y luego ni fu ni fa, y viceversa. Por tanto, si acudes a El Ingrediente el mejor consejo que te puedo dar es que vengas con la mente abierta (Y por supuesto con hambre).

Me ha gustado muchísimo que toda la Carta se pueda pedir en Media Ración, idóneo para compartir. Si sois muchos, probaréis de todo. En mi caso fuimos 2 personas. El camarero nos aconsejó pedir 5 medias raciones, tal como hicimos. Las cantidades son correctas, y salvo en platos que son por unidades como Albóndigas(que vienen 3) no se te harán escasas.

De mis 5 elecciones, 4 fueron excelentes y una de bien. Con los postres pedí dos y salgo descontento, demasiada brecha frente a lo previo. Esperaba más.

De mi visita El Ingrediente salgo muy satisfecho por su apuesta por la originalidad (con eso me ganan mucho) y su correspondiente puesta a punto y logro. Solo puedo exigirles mayor variedad de postres (apenas hay 3 y una Tabla de Quesos) así como una mejor ejecución de uno de ellos. La Tarta de Queso no es la mejor de mi historial pero deja satisfecho. Cené por 35€ y si hubiesen sido 10€ más no me hubiese importado, ya que lo vale con creces.

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El Ingrediente era uno de esos restaurantes que teníamos pendientes desde hace mucho tiempo, por eso en cuanto los exámenes de la oposición nos dieron tregua (un ya lejano 29 de febrero) decidimos ir a probarlo.

De este restaurante atrae particularmente su cocina de mercado, con ingredientes de temporada. Comenzamos la cena con un plato cuyo nombre despertó al máximo nuestra curiosidad. Unos berberechos hechos con salsa carbonara. Un plato divertido y curioso.

Curioso y rico también su codillo estofado con cerveza negra o su buenísimas carrilleras al curry rojo. Pero si hubo un plato que nos encantó y sorprendió al mismo tiempo, ese fue su steak tartar de pato con piparras fritas y mayonesa japonesa.

El postre, una tarta de potente queso azul puso el gran broche final a otra cena digna de mención. Por lo menos, podemos consolarnos recordando los bien que cenamos en nuestro último puñado de salidas. Ya queda un día menos para recuperar aquella normalidad.

✅Puntos fuertes: una cocina de temporada refrescante y divertida.

⭕️Puntos débiles: un local un poquito más grande les vendría muy bien.

💵Precio: 30-35€/pax.

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Cuando la mezcla es un arte Un pequeño restaurante donde se disfruta de los sabores. Sólo ver la carta hace que empieces a salivar y a intentar reproducir mentalmente los sabores que te proponen. ¿Cómo se puede mezclar un rabo de toro en lasaña con una salsa de marisco? Pues se puede y está exquisita. Al igual que te preguntas si un bacalao Skrei se verá deslucido por una salsa de jalapeños., pues no.Saben darle el justo punto para que el picante no tape un excelente producto y de en boca el picor necesario, apreciándose hasta el cilantro que lo acompaña. También es imprescindible probar los rabitos de cerdo con salsa de caracoles y anguila ahumada. Está para hacerle un monumento a todo el equipo de cocina!!... Al igual que al camarero y la camarera que nos sirvieron, nos ayudaron a seleccionar medias raciones y a dar orden a la comanda. Me hubiera gustado hablar más de cada plato con ellos, pero comprendo que el local es pequeño y que todos queremos sus mimos De postre una excelente panna cotta de chocolate, que pediré la próxima vez pero con un pelín menos de pepperoncino diaboli. Todo lo que ofrecen se nota que tienen muchas horas de cocina y que son platos con dias (y noches!) de trabajo y...