Hace 5 meses, quien suscribe, emitió una reseña donde de forma explícita, señalaba la calidad profesional y humana de D. Moisés, Chef del Gran Barril, uno de los 25 restaurantes que el Grupo Oter dispone en Madrid y que en palabras del propio fundador. D. Gerardo Oter, se manifestaba en la página Web del Grupo empresarial, del siguiente tenor literal, "La garantía de calidad se basa en dos pilares inseparables, materia prima de calidad y un esmerado servicio", de igual modo señalaba, que, "La implicación, pasión y empeño de las personas que formamos parte de Grupo Oter, es otra importante clave que explica la buena acogida que tienen siempre nuestros establecimientos, pero la más importante es la búsqueda y confirmación de la satisfacción de nuestros clientes, manteniéndose así viva la ilusión por acometer nuevos proyectos".
No puedo estar más de acuerdo con el fundador de tan prestigioso Grupo empresarial, es por ello, por lo que me dirijo en exclusiva a Vd. como responsable del Gran Barril y demás restaurantes del Grupo.
La nefasta experiencia vivida ayer, sábado 30 de septiembre, en el Gran Barril, amén de inaudita, entiendo que requiere de su exposición, más allá de esta reseña, y por ello, sugiero a D. Gerardo Oter, tenga la amabilidad de permitirme de manera presencial, la exposición de los hechos acaecidos en el día de ayer, y que a continuación describiré de manera sucinta.
Desde hace muchos meses, todos los sábados, almorzamos mi señora y quien suscribe en su restaurante, mi reseña de hace 5 meses da fe a la plena satisfacción con el Chef, no solo por su categoría profesional, sino además por los valores que Vd. refrenda y que anteriormente han sido expuestos, ya que se puede ser un gran chef, pero un SEÑOR con mayúsculas, por su educación y saber estar, no resulta nada sencillo, dado que su principal faceta, y de mayor complejidad, será cocinar de manera exquisita los productos, siempre de gran talla, que ponen a su disposición. En el caso del Director de Sala, jefe de Sala, responsable del restaurante o como queramos identificarlo, este "señor", no se enfrenta a la enorme dificultad de preparar los platos de un modo que los clientes vuelvan de nuevo a su restaurante, su papel debería ser, la de una persona que gestione, además de a los trabajadores y compañeros suyos, a los clientes, dado que ellos, o nosotros, son quienes permiten, o no, la viabilidad del negocio. Pues bien, la persona que lleva a cabo este rol en el Gran Barril, actuó de un modo inaceptable en el fondo y en las formas, actos impropios, a los valores que Vd. invoca, mediante un comportamiento grotesco, acompañado de una falta de educación y respeto hacía mi señora, del todo inaceptable e inadmisible y ante el rubor de los allí presentes, empezó a verte insinuaciones sobre cuestiones que de manera explícita espero exponerle con todo lujo de detalles. Jamás, y soy un cliente de sus diferentes restaurantes, he visto un personaje de peor catadura moral y falta de educación, menos aún en el puesto que este personaje ostenta. Se me ocurren profesionales de su Grupo, por ejemplo, Jose, uno de los maîtres del Barril de las Letras, un Señor, en educación y saber estar, amén, de un gran profesional, las antípodas del personaje que gestiona el Gran Barril.
Quedo a la espera de poder exponer en profundidad y con todo tipo de detalles, lo que aconteció en el día de ayer en el Gran Barril, de un modo presencial ante D. Gerardo Oter, persona que, con su talento y esfuerzo, logró un hito, al conformar 25 excelentes restaurantes, que lamentablemente no siempre disponen de verdaderos profesionales, como en el caso...
Read moreThe El Barril is a chain of restaurants around Madrid specializing in tapas, fresh seafood and other choices like paella and arroz a Banda. I was taken here by friends who are from Madrid and we had a fabulous evening. It's certainly not cheap but the quality of the seafood here is amazing. Unfortunately like most of Madrid the choices for vegetarians are limited.
We had quite a few seafood starters and I had a whole grilled fish for main. Absolutely loved the red prawns and it was one of the juiciest prawns I have ever had. The grilled fish was also very nicely done and I picked it clean :-) service was very good and staff were always around to check up on us.
I would say it's one of the best places for seafood in Madrid and I am glad we went here. It was packed throughout the evening and there is places to sit outside as well. The interior of this restaurant is posh and the waiters are very well dressed.
Happily...
Read moreReservamos una mesa en terraza para 10 personas para comer un domingo.
Cuando llegamos nos encontramos con que la mitad de las sillas estaban puestas al sol, y era materialmente imposible aguantar más de 10 minutos sentado en aquellas condiciones.
Le comentamos el problema al encargado, un individuo llamado Avelino, que mostró un total y absoluto desinterés por solucionar el problema. De hecho su primera reacción fue insinuar que la culpa era nuestra por no haber reservado una mesa “específica”. Creo que es la primera vez en mi vida, en la que tengo que especificar cuando hago una reserva que la mesa que quiero tiene que tener unas condiciones suficientes y aceptables para poder sentarme en ella.
Trató de quitarnos de en medio moviendo la mesa unos 10 cm y diciendo que ya estaba solucionado. Volvemos a requerir su presencia, y tras una demora excesiva, volvió a presentarse para decirnos que no nos preocupáramos y que el sol se iba a ir. Eran las 2:30 de la tarde, era obvio que el sol se iba a ir, pero a las 8:00 de la tarde o a las 9:00 de la noche, no durante la comida. Tras proponerle una solución para cambiar la ubicación de la mesa, nos dijo con bastante prepotencia que era imposible, algo que claramente no era así, simplemente no le interesaba que comiéramos allí, creemos que la razón era porque íbamos con niños.
La única solución que nos quedó, fue pedir el libro reclamaciones y marcharnos de allí.
No sin antes decirle al encargado, que nos había dejado sin comer y ni siquiera nos había pedido disculpas, ante lo cual ni siquiera reaccionó.
El resultado es este: reservamos una mesa en terraza, y nos ofrecieron una donde era imposible comer sin pillar una insolación.
No nos dieron soluciones, no nos pidieron disculpas, y mostraron un total y absoluto desprecio por atendernos.
Es muy posible que crean que son el único establecimiento de Madrid donde se puede ir a comer marisco un domingo, pero yo desde aquí les digo que se equivocan.
Para las 10 personas que estábamos ayer allí, de hecho ya no son ni una opción.
Así que ya saben, si desean ustedes comer en la terraza, reserven una mesa “específica” en la que sea posible hacerlo sin coger una insolación, de lo contrario les puede pasar lo mismo que nos pasó nosotros. Y por supuesto, si van con niños, mejor...
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