La comida no puedo valorarla, ya que solamente pudimos probar un entrante y estaba aceptable. 4 suppli.(14€)
Nuestra experiencia fue, sencillamente, nefasta. Estuvimos una hora y cuarto sentados y solo fueron capaces de servirnos dos bebidas (mal servidas) y un entrante. El servicio fue lo más pésimo que he vivido jamás en un restaurante.
Nada más llegar, tras comprobar que la reserva era correcta, nos hicieron esperar unos tres minutos de pie en la entrada mientras la persona encargada se ocupaba de preparar copas o atender otros asuntos que no comprendimos. Fue una camarera de la terraza quien, al vernos ahí plantados, tuvo que entrar y preguntar por nuestra mesa para poder sentarnos.
Nos tomaron nota de la comida enseguida, pero no de la bebida. A los 20 minutos de estar sentados nos trajeron una vela de mantequilla comestible que formaba parte del aperitivo, pero como llegó tan tarde y sin bebida alguna, no tenía ningún sentido. La rechazamos.
Además, nada más sentarte, colocan el aperitivo sin preguntarte si lo quieres o no, y te sirven directamente una botella de agua aunque hayas pedido una jarra. Todo ello suma más de 10 € simplemente por sentarte a la mesa, sin haberte dado opción a decidir si lo deseas o no.
El camarero que nos atendía tuvo que venir dos veces a preguntarnos por las bebidas, y ni siquiera recordaba haberlo hecho la primera vez. Cuando finalmente llegaron (después de mucho tiempo), estaban equivocadas. Aun así, el entrante tardó casi media hora en llegar, y lo tuvimos que comer sin una de las dos bebidas que habíamos pedido.
Tras terminar el entrante, pasaron cerca de treinta minutos más sin rastro de los platos principales, dos platos de pasta. Durante ese tiempo, varios camareros pasaron por nuestra mesa, completamente vacía, sin mostrar el más mínimo interés ni preguntarnos si faltaba algo.
A la hora y diez de haber llegado, decidimos pedir la cuenta sin esperar más. La chica que vino a cobrarnos parecía contrariada, y lo estuvo aún más cuando le comentamos que nos estaban cobrando entero un aperitivo que había llegado tarde, incompleto y que ni siquiera consumimos. Nos dijo que habían tenido un desastre en la cocina, debe ser solo con nosotros, porque las mesas que teníamos alrededor fueron servidas con normalidad. Y si lo tuvieron: por qué no nos avisaron antes? Empezar a comer sin tener puestas las bebidas también es un desastre de cocina? Poner un aperitivo sin las bebidas también lo es?
En resumen: un sitio para no volver. El servicio fue pésimo, con un nivel de desorganización y desinterés inaceptable, y todo esto con precios desorbitados (los platos de pasta rondan los 25 €). Comiendo a la carta, con cubierto, entrante, plato principal, bebida, postre y café, fácilmente se puede superar los 50 € por persona. Un auténtico despropósito.
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Read moreFuimos al restaurante mi pareja y yo, para celebrar nuestro aniversario. La comida estaba muy buena, pero nos decepcionó en varias cosas.
Al sentarnos nos ofreció el camarero agua, trayendo la botella (muy pequeña, por cierto) abierta, por lo que imaginamos que sería gratuita, puesto que sino nos hubiese preguntado directamente por la bebida que queríamos con el menú. Para nuestra sorpresa, se nos cobró 3,5€ extras por esa botella, la cual de haberlo sabido, no hubiésemos aceptado. Al comentarle el malentendido recibimos una respuesta muy vacilona y que solo le faltó reírse en nuestra cara, una actitud del todo improcedente y nada profesional.
Además, la carta del menú que nos dieron ponía que incluía postre, pero al parecer, por lo que nos dijo de nuevo el camarero, si lo queríamos teníamos que pagarlo, aunque en la carta pusiera lo contrario.
Por último, y no por ello menos importante, uno de los entrantes del menú era una vela de mantequilla. En vez de traérnosla con el resto de entrantes como parece lógico, observamos que el camarero de nuestra planta (la de arriba del todo) no se lo sirvió a ninguna mesa. Como estabamos muy extrañados, a mitad de nuestro plato de spaguettis carbonara, le pregunté que qué era la vela de mantequilla (dudaba de si ya nos lo habrían puesto, aunque nada tenía nada que ver) y de nuevo, además de que demostró que sabía de sobra que no nos la había servido, recibimos por respuesta: “sisi, ahora la traigo”, lo cual nos dejó claro de que además de no recibir ni un lo siento, no había sido un olvido, sino que por lo que sea, decidió no servir uno de los entrantes en su sección. Finalmente, nos comimos ese entrante tras el plato principal, lo que fue una pena puesto que la carbonara estaba muy muy buena y al final terminamos con el sabor de la mantequilla.
Nos dio mucha pena el trato que recibimos puesto que el restaurante es muy bonito y por las reseñas que había visto eran muy positivas. Solicito que como mínimo, modifiquen la carta para que si no incluye postre, los clientes lo puedan saber. Mi novio esperaba tomarse el Tiramisú y se fue muy decepcionado al enterarse en el último momento de que solo entraba el café...
Read moreI had a fantastic experience at the restaurant that is also located in Trastevere, Rome. As someone who lived in Rome, discovering a familiar place brought a wave of nostalgia. The charming atmosphere perfectly complemented the delightful food. I ordered a carbonara, and its authenticity took me back to the flavors of Rome. However, the portion size was a bit small considering the price. Additionally, the timing was a bit off when the waitress brought the focaccia with the pasta. Despite these minor hiccups, my overall impression was positive. The restaurant managed to capture the essence of Trastevere and its cuisine, making it a lovely...
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