Llegamos a las 21:05 de un sábado, habiendo sitio de sobra y poca gente. Nos sientan rápidamente en una mesa de la terraza y nos toman nota de la bebida. Mientras ojeamos la carta, otro camarero viene a preguntar si nos han tomado nota de la bebida, y le decimos que sí, pero no nos sacan nada.
Pasados 10 minutos vienen a tomar nota de la comida, y les recordamos que no han servido la bebida. La vuelven a anotar, y entonces sí que la traen (aunque no completa, pedimos 2 cervezas y 1 agua fría, y el agua no la sirven). Pasa media hora sin que nos traigan nada de la comida, únicamente unas patatas de bolsa que sirven con la bebida, y pedimos otras 2 cervezas y les recordamos el agua, la cual sirven.
Cuando llevamos 1 hora sentados en la terraza, por fin nos sirven el primer plato de los 3 que hemos pedido, unos mejillones, el cual está bastante bueno aunque los mejillones podían haber sido limpiados mejor. Tenemos que esperar otra media hora para que nos saquen el segundo plato pedido (tartar de atun y gamba), el cual también está bastante bueno. Cuando lo terminamos pedimos otra cerveza, la cual no llegan a servir.
Mientras esperamos el tercer plato, y llevamos sentados en el restaurante casi 2 horas, nos salta una cucaracha de la calle a la mesa. Los empleados rápidamente nos cambian de mesa al interior y piden disculpas, explicando que hay muchas en la calle y el ayuntamiento está fumigando.
Poco después traen el tercer plato, el cual es distinto del que hemos pedido en la carta. Se lo decimos al camarero, que nos dice que estamos equivocados, pero trae la carta y compruebe él mismo que tenemos razón. En ese momento sale la cocinera a pedirnos disculpas, ya que parece que las cartas no están actualizadas, y se ofrece a cambiarnos el plato por otro. Declinamos la propuesta ya que llevamos más de 2 horas, y ya se nos ha pasado el hambre y las ganas de cenar, y pedimos la cuenta.
En la cuenta, lógicamente, no aparece el tercer plato que sirvieron equivocado, pero aparece una cerveza de más (la que pedimos después del segundo plato pero que no nos sirven). Se lo comentamos tras revisarlo, y la quitan de la misma. Sin embargo, nos cobran por ejemplo 2€ del agua, la cual se ha quedado casi entera en la mesa cuando nos ha saltado la cucaracha, además de que se trata de agua filtrada, no mineral. Era lo mínimo después de todos los problemas.
Resumen: la comida rica, pero todo lo demás un desastre. Entregan cartas que no están actualizadas, tardan en servir todo una eternidad (especialmente la comida), llegando a pasar 1 hora entre plato y plato, y hay que tener cuidado con bichos del exterior. A la hora de pagar, hay que revisar bien la cuenta porque te van a cobrar todo lo que hayas pedido, incluso lo que no te han servido, y no esperes ningún detalle por su parte después de una experiencia muy deficiente.
Sintiéndolo mucho,...
Read moreMalapecora has indoor and outdoor seating, waitstaff was welcoming but didn't speak English. Menus were available in English. Ordered the Artichoke with shaved Iberian acorn-fed ham and quail eggs, Goat cheese salad, and Grilled turbot with its skin and seasonal vegetables. The artichoke appetizer was rather bland and had one quail egg, not 'eggs' as the menu noted. The goat cheese salad was also bland and consisted of mixed greens, hazelnuts, tomatoes, sweet peppers, onion, and of course goat cheese. One of my pet peeves are 'fancy' restaurants that don't have balsamic vinegar and olive oil available. The salad seemed to have oil on it, but no other dressing. When I asked for balsamic vinegar and olive oil they brought red wine vinegar- yuck!! The turbot was a very small portion with no flavor and was not served with a wedge of lemon. Sadly the best part of the meal was their homemade potato chips, which were tasty. Not...
Read moreVamos cada verano cuando veraneamos en Salou. Y este año ha sido decepcionante. Te hacen levantar para ver los vinos que tienen, en lugar de tener una carta de vinos que sería lo normal. Nos trajeron el vino después de solicitarlo unas 5 veces. Se lo pedimos a un chico q parecía no entender español, que no hizo nada por pasar el recado. Y tampoco nos dijo que no nos entendía. Pero luego lo volvimos a pedir a otro camarero diferente y lo mismo. Tardaron más de 20 minutos en traernos el vino. Ya llevábamos media cena o más, cuando lo trajeron y además caliente, en agosto cuando hacia muchísima calor. Una vez abierto nos traen una cubitera. Por lo que acabamos la cena y nos sobró más de media botella. Pedimos también pan para un huevo frito que se comía nuestra hija, y lo pedimos también 4 o 5 veces. La niña se comió el huevo con el pan de la hamburguesa de mi marido, pq tenía hambre después de 15 minutos esperando. Entiendo que es agosto, pero tampoco tenían tanta gente como para hacer esperar tanto por una botella de vino y dos trozos de pan. Le dije lo del pan de la hamburguesa q se había comido la niña y no se les ocurrió traer otro pan de hamburguesa, para q mi marido se la pudiera comer Tampoco pidieron disculpas, ni tuvieron ningún tipo de atención. No volveremos más. La atención fue muy mala y muy lentos. Una pena pq siempre habíamos comido muy bien. Por cierto tb encontramos una cucaracha...
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