Sidrería La Solarina — Restaurant in Valdés

Lamentable experiencia vivida en este Restaurante. Éramos solo dos personas, un día de mucho calor. A las 14h nos acercamos a la puerta y ya nos dio mala espina que el dueño nos estaba viendo esperar y no nos hacía ni caso. Al final decidimos llamarlo y pedimos mesa para 2 en la terraza (dentro no servían) y solo nos ofreció una mesa al sol, metálica que literalmente echaba fuego. Le pedimos amablemente si no podía ser una mesa con sombra, de las muchísimas que estaban vacías. Nos dijo que no, que eran todo mesas para cuatro y seis personas (en realidad eran dos mesas cuadradas pequeñas arrimadas una a otra, solo había que separarlas). Desconozco si esperaba la llegada de algún tren o autobús con destino directo a su restaurante, pero dudo que fuera a llenar ni la mitad de todas las mesas libres. Eso sí, la empatía del dueño fue nula, nos dejó marchar sin comer y no mostró el más mínimo disgusto o precupación. Fue un momento muy desagradable, aunque parece que solo para nosotros, el dueño está claro que celebró que nos fuéramos sin desaprovechar una de sus flamantes mesas destinadas a 4/6 personas. Debían estar pegadas con pegamento. Trato muy desgradable. No volveré ni lo...

Ay Luarca, Luarca, que bonita eres y que pocos sitios te apremian... Después de disfrutar de unas vistas preciosas en el pueblo decidimos parar a comer... Entre múltiples sitios nos encontramos con este local, ambiente ajetreado, gentío y claramente susurros no conformistas entre las mesas.

Al sentarnos nos atendió lo que parece el dueño, un hombre afable y que claramente es el único que da un duro por este restaurante.

Tardaron en servirnos 1 hora entera, dos cachopos y una oreja, la comida la verdad que no estaba mal, si fuera una buena experiencia no me hubiese importado repetir pero el servicio fue nefasto. La amabilidad en los camareros no se ve, parecía que te hacían un favor por dejarte existir y no pisarte cual persona de mediana edad que ha perdido el rumbo del vivir.

Me hubiera gustado hacer foto a la comida pues fue lo único medianamente disfrutable, pero bueno.

Nos iremos a disfrutar del pueblito, que almenos eso sí no me ha decepcionado.

Y recordad, disfrutar de comer y sino almenos de...

Pequeña sidrería con terraza. En el interior hay 3 mesas pequeñas para poder comer de estar sentado y otras dos de estas altas. Y en el exterior tiene terraza que suele darle el sol. Reservamos. Como nos suele pasar en muchos sitios, que es que te quieren empaquetar para que te sientes donde ellos quieren, en un principio en la terraza pero aunque daba el sol hacía frío, luego en una de las altas de dentro y finalmente nos sentaron en una mesa de estar sentado que no había nadie...lo de siempre. Luego el servicio es bueno, sobre todo rápido que se agradece mucho. La comida esta ricas y no se pasan de precio. Un precio razonable y una comida rica. Destacar el pan que estaba super tierno. El cachopo podría ser un poco más grande, porque es no muy grande y los torreznos los he comido mejores, son correctos, pero sin más. Es una sidrería para comer o más bien tapear, pero como mucho podéis ir un grupo de 4 personas porque es...