VEGANS or anyone with ALLERGIES BEWARE!
I am giving this restaurant a bad review, not because of the quality of food but because I found CHICKEN in my VEGAN curry with no apology from staff.
As I got to the end of my vegan red curry I was shocked to find a piece of chicken hiding amongst the tofu and veg. When I called the waiter he asked me if it was ‘just the one piece’ (‘solo un trozo’) which I told him it was. I explained that this wasn’t the point but he didn’t seem to understand why it was quite a big deal for someone who NEVER eats meat anymore. We had a bit of a back and forth and then he went off to talk to the kitchen. We didn’t see him after that and he never came back to tell us how chicken had ended up at the bottom of my curry to even see if we wanted any more drinks or dessert.
After what happened I would have at least expected an apology, and perhaps the offer of a complimentary drink or dessert. Even a sincere ‘Lo siento’ would have been enough for us but both waiters we dealt with seemed completely indifferent to the situation.
I would expect his type of response in a restaurant that doesn’t have allergen symbols on their menu or perhaps charge so much, but not from a fairly expensive busy restaurant in the heart of Russafa.
Neither of us will be recommending this restaurant to our vegan friends and I will not be back out of principle of how it was handled. I have worked in hospitality for several years and would never treat people in this way. And when the owner or whoever responds to this bad review with a ‘I’m sorry we will talk to our staff and find out what happened’, frankly I don’t think this is good enough.
Luckily I am not allergic to chicken but for anyone who has any severe allergies - DO...
Read moreBuena comida pero mala gestión
Fuimos a este restaurante el sábado 1 de marzo, día de la primera mascletá en Valencia. La comida estaba buena, pero la experiencia quedó empañada por la pésima organización del personal. El local estaba prácticamente lleno, pero solo había tres personas trabajando: dos camareras muy jóvenes (una de ellas con solo seis días en el puesto) y un solo cocinero.
El resultado: tiempos de espera larguísimos y un estrés innecesario para las trabajadoras, que, a pesar de su esfuerzo y buena actitud, simplemente no podían con todo. Es inaceptable que la dirección del restaurante permita una situación así en un día de tanta afluencia.
No se puede ofrecer un buen servicio sin cuidar primero a los empleados. Por su falta de previsión y mala gestión, este restaurante se merece una mala reseña. No volveremos hasta que demuestren que respetan a su equipo y a sus clientes.
Ya que no puedo responderte, edito mi reseña en respuesta a tu desagradable contestación.
No se trató de una crítica gastronómica, sino de una crítica constructiva. Siempre defenderé la importancia de cuidar al trabajador, ya que, al liderar un equipo amplio y trabajar de cara al público desde hace años, sé de primera mano que es imprescindible planificar todo el año para contar con el personal adecuado en los momentos de afluencia, protegiendo así tanto al empleado como al cliente. Si algo tan básico se desconoce, no entiendo cómo se puede llevar un restaurante.
Tu falta de respeto innecesario denota tu irresponsabilidad y falta de crítica. Aún así, te cuento mi experiencia ya que tanto te ha sorprendido mi comentario como clienta insatisfecha. Fuimos a comer a las 15:30h (aproximadamente 1:30h después de la mascletà), de hecho ni siquiera estaba lleno el restaurante en ese momento. Nos negaron hacernos unos cócteles porque las chicas no daban abasto; entre el entrante y el principal hubo una demora de 40min. Pedimos un plato de papas o si tenían algo similar que nunca llegó a nuestra mesa porque tardaban tanto que estábamos con mucha hambre. Finalmente en la cuenta nos cobraron una cerveza que no habíamos pedido. Y sí, habían dos camareras únicamente. Si la dueña estuvo "ayudando" haciéndose pasar por camarera (cuando sí tiene que ayudar porque un buen jefe debe estar en el terreno igual que todos) hizo muy bien su papel de no querer parecer una camarera ya que brilló por su ausencia.
Una vez más, insto a que se cuide del personal, pues un equipo contento, significa clientes satisfechos y negocio en buen...
Read moreEspectacular, la decoración del local es acertada, el camarero simpático, atento y servicial y la compañia formada por seis amigos excepcional. Aseos correctos, en el día de autos el de caballeros estaba fuera de servicio. Destacar la palmera decorativa a la salida de aseos que me hace recordar la cintura esbelta que me caracteriza y que me permite esquivar las hojas y no dañarme un ojo.
Pedimos 5 menúes Degustacion 1, con dos cervezas, dos aguas y una botella de vino que honestamente estaba buena, que fue lo único que no llevaba coco. Salimos a 25€.
En cuanto a la comida, discutamos el concepto con el fin de discutirlo, hubo momentos que te vienen recuerdos de la infancia con su plastelina, o recuerdos de bebê, con sus cambios de pañal,, supongo que por alguna salsa, su color, textura y me atrevería a decir sabor.
Prefiero pensar que todo ha sido un malentendido debido a mi ignorancia sobre la comida tailandesa o una pesadilla que con unos meses de terapia consiguiré olvidar.
Rollito, brocheta de pollo y unas croquetas que dicen que eran de pollo y calamar pasaron por el aparato digestivo. No había sabor o yo no lo encontré, y busco, de verdad que busco. Tallarines sobrecocidos, arroz hervido, salsa de coco sin comentarios y red curry sin otro particular les saluda atentamente. Vamos, que si hay hambre todo tiene que pasar de boca a estómago.
El postre, es SACRILEGIO, no hay apelativo posible, debería catalogarse crimen contra la humanidad llamarlo arroz con leche, por mucha leche de coco que pongas a ese postre. Por Dios que no lo pruebe un vasco, porque allí sí que lo hacen bien y si es aizkolari le pueden entrar ganas de cortar las palmeras decorativas del local. Ahora en serio, realmente MUY malo.
Afortunadamente, el mango que venía con el arroz coloreado de violeta Play-Doh estaba bueno, bueno hasta el punto que me lo comí con piel, cuando hay hambre haces cosas que te avergonzarías.
Pero no todo está perdido, confío que el picante que comí me libere del aparato digestivo todo esto y que saque todo el mal, sin tener que recurrir al exorcismo del padre Karras, estoy convencido.
No me queda otra que, muy a pesar mío, valorar la experiencia como nefasta. Me pareció muy malo y caro, muy caro por lo que te ponen. Me reservo recomendarlo o no, depende del aprecio que le tenga al que...
Read more