Mercè — Restaurant in Valladolid

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Restaurante situado al lado del Mercado del Val , un restaurante reciente en la ciudad. El local dispone de 3 salas , dos en la planta principal mas otro salón en la planta baja, mas o menos con capacidad para unas 30 personas. El local tiene una bonita decoración.

La carta se compone de 5 secciones : la sección de bocados con diversos platos individuales como tacos , brioche , sam, etc , otra sección de entrantes para compartir , la sección de carnes , pescados y postres. Una buena variedad de platos , los bocados son mas de cocina internacional y el resto mas de cocina local.

Fuimos a comer 4 personas y pedimos todo esto:

De aperitivo nos pusieron una crema de boletus con falso caviar ahumado y hoja de guisante. Estaba rica.

1 bocado para cada uno.

Taco de lengua wagyu con cebolla roja marinada(xnipec) y cilantro

Saam de carrillera iberica al curry rojo con espuma de coco

Fuera de carta “kebab” de pollo de corral guisado con shitakes.

Brioche ahumado con gambas , mahonesa de sus cabezas y guacamole. Este fue el que comí yo , un brioche tostado a la plancha con un picado de gambas prácticamente crudas mezcladas con una buena mayonesa hecha con las cabezas , unos puntos de guacamole y unos crujientes de arroz . Estaba bastante rico

Para compartir:

El arroz del día , arroz con gambas y alcachofas. Un arroz seco , punto correcto , buen sabor a gambas y tiernas alcachofas fritas ligeramente crujientes , muy buenas.

Oreja lacada con una demiglace , muy tierna , salsa melosa ligeramente dulce , bastante buena , para mojar bien de pan en la salsa.

Platos principales:

Cochinillo confitado con demiglace de sus manos , macadamia y toffe de orejones.

Bacalao con guiso de manos de cerdo. De este probé un bocado y estaba bastante bueno , un guiso potente de cerdo con el bacalao al punto.

Y el plato que me pedí para mi , los canelones de lechazo con queso de oveja ahumado fundido y patata frita morada. El lechazo desmigado muy rico con bien de queso fundido y una salsa del guiso del lechazo para aportar jugosidad al conjunto.

De postres pedimos:

Espuma de arroz con leche con helado de canela y arroz inflado.

Ganache de chocolate , esponja de frutos rojos y nubes de chocolate

Fuera de carta , torrija con helado de frutos rojo y helado de leche merengada.

Los postres fue lo mas flojo de la comida , el helado de la torrija tenia cristales de hielo y la torrija le faltaba algo de jugosidad. El arroz con leche no estaba mal y del postre de chocolate las esponjas no nos gustaron.

Resumen : Un buen sitio donde comer , la calidad fue aumentado desde los bocados a los principales. A mejorar los postres. Buena atención por parte de las camareras, un sitio agradable.

Precio : 157,5€ con un finca resalso(16€) botella de agua 1L(2,5€) , servicio de pan...

Don't be fooled by this little "hole in the wall"; this gem in downtown Valladolid represents true Spanish hospitality. The staff become instant friends, there is so much authenticity in how you are hosted here. So refreshing in a world of "turning tables", tourist driven restaurants... Food is genuine and delicious, it heroes the best this land can offer, with just a little twist of chef Luis Miguel's creativity. Amazing food, a great wine selection and an outstanding group of people make this a must visit if you're in the hood. Make a reservation, they're always packed....

Era la segunda vez que iba y la experiencia fue aún mejor (por imposible que parezca) que la primera. Y eso que las expectativas eran altísimas y que en vez de 4 personas, como fuimos en esa ocasión original, esta vez éramos 11 los comensales a contentar. Y a fe que lo lograron, por los comentarios de la sobremesa y la post sobremesa de después. El menú fue realmente delicioso, con producto de temporada (níscalos y boletus) como protagonistas, y con los ya imprescindibles canalones de lechazo y croquetas de carrillera como entrantes espectaculares. De segundo la chuleta, la presa ibérica y la corvina (IM PRESIONANTE, en dos palabras) pusieron el nivel por las nubes. Y aún faltaban los postres y estos sí te hacen tocar el cielo... Ese tiramisú..., la tarta de queso y el bizcocho con piña son un placer de dioses. Pero lo mejor de TODO fue el trato dispensado por el personal que nos atendió, y muy especialmente por el camarero que soportó todas nuestras bromas y el elevado volumen de nuestras risas (de quien no recuerdo su nombre, mi más sincero perdon por ello) que hizo que nuestra visita fuera todavía más increíble. Ni qué decir tiene que ya estoy (estamos) deseando repetir, pero hasta entonces voy a seguir saboreando tan magnífica experiencia. Muchas gracias a todo el equipo de La...