La verdad es que impresiona de entrada la decoración!! Suena música vikinga de fondo, los meseros están vestidos de vikingos y te saludan como tales, hay muy buena ornamentación en general y la tremenda posibilidad de dar un ambiente muy especial a la comida. Me atendió Francisco Wallas a quien felicito por su calidez y el esfuerzo permanente de hacerte sentir como vikingo, excelente Francisco. Hay algunos detalles que se transforman en puntos muy bajos para un restaurante que tiene estos precios (caros!!): pedí una cerveza michelada y esperaba que me llegara al menos un copón de medio litro, con harta espuma y sabores muy intensos y marcados. A cambio llegó un vaso de 350 cc y una cerveza extremadamente ligera y con una michelada poco pronunciada. Consideren que la cerveza y la michelada costó cerca de $6000. Se notaba en la carta especialidad en carnes así que me arriesgué y pedí un bife chorizo con crema de choclo, un clásico en los asados, punto 3/4. Cumplió con la cantidad de carne un bife aproximadamente de 350 grs. La terminación de la preparación estaba correcta, pero se notaba mucho que fue hecha la plancha y no a las brasas como es correcto, esto suele ocurrir en muchos restaurantes que aseguran tener carne a la parrilla pero que en realidad ocupan planchas o cocinas para su preparación, me parece que es algo entendible pero tienes que asegurarte que tu carne tenga un muy buen sabor al ser un corte magro!! No tenía magia, sazón, no lo acompañaron con un trozo de mantequilla, ajo y/o romero en su cocción por ejemplo. Estaba pálido y con poco sabor, de hecho me recargué bastante la sal para comerlo. La crema de choclo estaba muy rica una pastelera con un sabor muy delicioso, pero venía muy poco para hacer un restaurant vikingo!! Pagué $30.000 por esta comida y ni siquiera quede tan satisfecho. Me sorprendió que hay mucha asistencia de clientes, seguramente porque la idea en un principio es atractiva, pero creo que muchos no vuelven por los detalles aquí expuestos. Es un lugar que recomendaría pero con observaciones, no hay una experiencia completa y 100% satisfactoria. Un detalle no menor es que como novedad, tienen un robot que te trae los platos, pero es un gato chino jajajajajaja eso no tiene nada de vikingo y desentona mucho con el concepto del lugar (ver vídeo). Disculpen que sea tan crítico pero por el valor de la carta su apuesta debería ser mucho más producida y preocupada de los detalles. PD: recomiendo que se preocupen de limpiar la botella de Tabasco, ver foto!!