Cerveceria Baskian — Restaurant in Bilbao

Resumen de la valoración: Nada recomendado. Mal servicio, comida mediocre y precios hinchados. Doy una estrella para poder valorar. Sinceramente espero que esto fuese todo un cúmulo de problemas y no fuera lo normal en el local.

Preguntamos si aún servían cenas, nos dijeron que sí, que a las 12 cerraban y nos llevó a la mesa (11:04). Nada más sentarnos nos repitió el camarero que cerraban a las 12 y nos dieron la carta, literalmente 3 minutos después ya nos había venido el camarero 2 veces preguntando si ya sabíamos a ver qué queríamos para cenar; ya la última vez se quedó al lado de la mesa hasta que le dijimos OK. Primero pedí una hamburguesa y preguntó a ver que pan y que salsa quería, le dije el pan y le pregunté a ver qué salsa le venía bien a la hamburguesa; total, las únicas respuestas que obtuve fue preguntandole 3 veces fueron: "Solo puedes elegir una", "La que quieras" y "Ahí ahí (Señalándome con el dedo donde ponían las 4 salsas como si no los estuviera leyendo ya)". La verdad que nos quedamos a cuadros mis compañeros y yo, he visto máquinas autoservicio que resolvían mejor las dudas. Al final pedimos una salsa cualquiera ¡A correr! Acabamos pidiendo unas croquetas de jamón, un burrito y 2 hamburguesas. Eso fue a las 11:08, pocos minutos después nos empezó a llegar la comida. Las croquetas eran mediocres tirando hacia abajo, teniendo en cuenta que son 6 croquetas y que valen 6,5€ te esperas algo que tenga mejor sabor que las croquetas congeladas de supermercado. Cuando llegó la comida se descubrió que la salsa era para las patatas, no para la hamburguesa; gracias camarero por habernos dado ese pequeño detalle cuando pediamos. En mi caso cogí la hamburguesa mexicana, a primera vista tenía buena pinta, pan artesano, le salía el queso por un lado... Pero eso fue hasta que la cogí que empezó lo malo. Nada más coger la hamburguesa noté que el pan estaba frío, como si lo hubieran sacado recientemente de la nevera; en el primer mordisco pude saborear el queso cheddar insípido y gomoso que tenía, los nachos reblandecidos y carne de escasa calidad. Según avanzaba la hamburguesa la cosa no mejoraba, había un sabor extraño que no conseguía averiguar, cuando llevaba ya media hamburguesa lo saqué y era algo totalmente inesperado, ¡Sabía a langostino! Ante mi incredulidad les di a probar a mis compañeros y habiendo dicho eso ambos coincidían conmigo, tenía un sabor que no sabíamos si venia de no haber limpiado correctamente la plancha o de qué. Mientras los demás de la mesa aún estaban acabado de comer, el camarero nos trajo la cuenta y me cobró. Se ve que por lo visto tenian muchisima prisa, ya que cobraron a las 11:19. Luego mi compañera me dio para acabar su hamburguesa, que era la carbonara, yo le quité los champiñones. Ella fue a comérselos solos ya que le gustan y al meterse un champi solo a la boca dijo textualmente: "Nada, olvidalo, en la hamburguesa no estaban tan malos, pero solos son incomibles." Menos mal que los quité previamente... La carbonara para sorpresa de nadie no es que mejorase la visión que tenia del local, otra hamburguesa más no muy allá embadurnada en salsa. Al momento en que que vaciamos los platos apareció otro camarero para retirarnos los platos y ya en ese momento nos levantamos y nos fuimos. Salimos del local antes de las 11:23 y no antes por que un compañero fue al baño y tuvimos que esperarle...

Sinceramente, un sitio al que nunca volveré y no recomendare. Casi 50€ y lo único que haces es hincharte, no esperábamos nada Gourmet, pero vamos, un mínimo teniendo en cuenta que las hamburguesas valen 11€ y el burrito 13€. El local Baskian lo único que tiene de vasco es que está abierto en Bilbao. Mi recomendación personal, si queréis ir a un sitio decente calidad precio y queréis estar al menos 10 minutos charlando con los compañeros id mejor al Burguer King, mejores hamburguesas calidad-precio, mejor servicio y no te echan tan rápido. Por el contrario, si quereis ver un Show de SpeedRun de cómo servir y echar a los clientes rápido este es vuestro local. No estuvimos ni 20 minutos...

Cambio mi puntuación de 5 a 1 estrella, debido a la mala experiencia de nuestra última visita:

El sábado 18 de diciembre, fuimos a comer a Baskian, en torno a las 16:00h. Nos situamos en la entrada, como de costumbre (donde por lo general debemos esperar los comensales; otras veces hemos ido directamente a ls barra y sin problema). Nos vio una camarera (no nos sonaba de otras veces), quien estaba mirando el móvil a varios metros, junto con un compañero suyo (le reconocimos de otras veces). Le mira, debiéndole indicar que estábamos para ser atendidos. Él nos mira y ella nos vuelve a mirar. Y vuelven a mirar al móvil. Nos vuelven a mirar y se echan a un lado, por la parte trasera de la barra, ocultándose descarádamente de nosotros. Nos dirigimos a ese lado de la barra, donde estaban esos camareros con otros, y le preguntamos a uno de ellos si la cocina estaba abierta, quien nos indicó que sí. Reaccionó el camarero que se había escaqueado, indicándonos la mesa en la que debíamos sentarnos. Le preguntamos si podíamos sentarnos en una de nuestras mesas habituales y nos dijo que no, que él ya estaba solo, razón por la cual únicamente podía controlar las mesas de la zona de la entrada, y que teníamos que sentarnos en aquella misma que nos dijo. Nos dejó una mala sensación entre el evidente escaqueo y lo relativo a la mesa. Y su atención, insistentemente "cagaprisas". No nos estaba gustando lo que estaba pasando; a cada detalle, peor experiencia.

Entretanto, antes de que el camarero nos trajera la comida, vimos cómo dos clientes de Baskian ocupaban mesas lejanas, sin mayor problema para él. No entendíamos nada.

Cuestión sanitaria a considerar, nos trajo los vasos cogiéndolos por las boquillas. Para acto seguido, atender a otros comensales quitándose el sudor de la frente con una de sus manos (por supuesto, esto ya lo había hecho también antes de servirnos, además de andar con el móvil y toquetearse la mascarilla). Aunque el camarero no estuviera enterado de las razones por las cuales todos (y él mismo) llevamos mascarilla, es una completa falta de higiene servir así. Cambiamos la botella grande de agua por individuales, cajitas muy caras, como siempre lo han sido en Baskian. Solo que esta vez, el servicio no justificaba ningún precio ya de por sí alto.

Para rematar, el primer plato que nos trajo, no lo habíamos pedido. Se lo dijimos y nos respondió ¡que eso es lo que tenía marcado!, como delegando en nosotros su error. A psrte de que nosotros jamás habríamos pedido lo que nos trajo, si no quería llevárselo de vuelta sin poner una excusa ajena a él, creo que mejor hubiera sido que que se callara. Y ya nos trajo los platos que sí correspondían con lo que habíamos pedido... salvo una de las raciones, pero lo toleramos por no perder más tiempo.

¿Aceptamos errores? Sí. ¿Excusas? Allá quien las ponga, pero mal hecho. ¿La falta de higiene? No. ¿El trato que recibimos desde que los camareros hicieron su descarado escaqueo? Imperdonable.

Empleados así, hacen flaco favor a sus empleadores. Tanto por jugar con la satisfacción de clientes asíduos, como por jugar con una situación que en especial está afectando a...

Decepción. No soy de los que van escribiendo reseñas, poniendo a parir gratuitamente a la gente. En este caso no he podido resistirme, a pesar de que ya han pasado unos días. No quiero hacer daño, no voy a volver pero como antiguo hostelero me dió lastima ver este encadenamiento de despropósitos en un sitio que yo tenía como un sitio seguro recomendable y de calidad. Cambio de gerencia? Dejadez? Ausencia de profesionalidad? Me pareció una pena como se puede dejar que un buen local se convierta en esto.

No soy asiduo pero sí que estado varias veces y lo tenía como un sitio, que así lo venden, no es franquicia y apuestan por la calidad y producto de cercanía. La persona que nos recibió a la entrada ni nos saludó, nos entregó una carta con cara de aburrimiento y nos señaló por "donde nos podíamos sentar" Después de un cuarto de hora (había cuatro o cinco mesas ocupadas) viene un camarero a preguntarnos si nos falta algo o estamos atendidos y se marcha enfadado, despotricando sobre sus compañeros. Al de otros diez minutos nos ofrecen traernos la bebida. Vaso con carmín, bueno... Suele pasar. Voy a la barra, al de un rato me miran, me cambian el vaso con indiferencia, y reproche entre camareros porque se les ha pasado. Disculpas al cliente? El menú tiene una pinta buenísima, pero... Aunque sea entre semana ha cambiado y tiene que ser especial a veintipico. Vale, ojeamos la carta, dos ensaladas. Vienen enseguida. Si no es de bolsa... Parecida, con unos tacos de queso y tres gambas (no mienten, ojo, lo indican en la carta, tres) lo que no indican es la calidad. (16 Eurazos cada una) Ahora si, se solapan varios camareros preguntando si queremos algo y al de un rato, sin pedirla nos plantan la cuenta en la mesa. Ah se me olvidaba. En mitad de la comida montaron un lamentable y absurdo espectáculo, molesto y ruidoso en la mitad del comedor, con cencerros para anunciar que sacaban una tabla gigante de carnes. Como dicen los jóvenes, "en serio???" Esto es una muestra de la calidad del local? No puede ser más cutre. Pagamos y al salir nos despedimos de la chica aburrida de la vida, de la entrada, que ahora está medio tumbada en la barandilla.

No me invento nada. Me pongo en el lugar del empresario que lo ha montado tan bien y repito, por mi pasado hostelero se me revuelve todo y me da pena por el esfuerzo, gusto y trabajo que han invertido para ver esto...