Bistronómika | Restaurante de Pescados Madrid — Restaurant in Madrid

We booked a table for dinner but I had a flu (with a lot of fever). We called and ask if it was possible to cancel the reservation due to circumstances, but they said we would be charged 25 euros each to do so. The website warned about it, but we would have appreciated some flexibility given the circumstances. So we went and were put in a counter, facing the wall ! In the middle of silverwear. So staff disturbed us all the time, to take them. Also, the restaurant was not full so we can not understand why we ate there. Staff was not polite. We asked for more time to look at the menu, they pressed us. They asked if we wanted water (charged) in the middle of the meal. We have to pay for the bread and they charged it twice. Never mentionned it before. We said we wanted no desert, they gave us menu back anyway. They did'nt answer our goodbye The prices were so expansive : 3.25 for half a bottle of sparkling water. 3 for bread. I took shrimp, it cost me 25 boxes. I had two shrimps on my plate. Madrid is a great place for food. We enjoyed a lot of great restaurants with food half this price (for example, tandem right next door with outstanding meals and service). Food was not bad but not salted and...

Esta reseña no va para clientes o posibles clientes, va para el local, en concreto su gente, que son los que le dan sentido y forma.

Este año decidí celebrar con mi mujer mi cumpleaños en vuestro restaurante, creímos que era la opción perfecta. En su día conocí el bistronómika del barrio las letras, estuvo bien, pero nada que ver con lo que es hoy.

Después de varios años probando sitios de aquí y de allá, del momento en el que nos encontramos nosotros, nuestro gusto y paladar, el cuerpo y las ganas nos piden volver al producto. Dejarnos, por lo menos durante un tiempo, de tantas fusiones y conceptos creativos que nos encanta, pero muchas veces nos han hecho perdernos o cansarnos a lo largo de un menú.

La honestidad y “sencillez” de vuestra cocina se muestra en cada plato. Un menú degustación totalmente sincero, delicioso, equilibrado y bien llevado. Pese a que no es para todos los bolsillos, creemos que bien vale lo que cuesta. El mejor producto, la gran tècnica, experiencia y talento en respetarlo y tocarlo solo lo justo para hacerlo perfecto y el maravilloso servicio, bien lo vale.

Cierro con el servicio porque deseamos haceros saber lo bien que nos hicistèis sentir, desde que entramos hasta que salimos fuimos siempre educadamente tratados, pese a un momento incómodo de una madre con su bebé (el pobre no tiene la culpa, los padres quizàs, cuando vamos a un local no solo està juego nuesta felicidad, la del resto de los comensales tmb nos salpica un poco…), el caso es que siempre estabáis con una sonrisa atendiendo todas nuestras necesidades.

Pero necesito hacer una mención en concreto a Fran, el sumiller.

Hace tiempo coincidimos en otro restaurante màs humilde, la sensación en su día estuvo bien, con sus cosas, pero no fue ni de lejos lo genial que ha sido aquí. Supo leernos, entendernos y sobretodo escucharnos y adaptarse a nuestro gustos y bolsillo. ELEVÓ la experiencia que ya era muy buena.

Sepan ustedes que han fichado a un hombre mucho màs maduro, màs profesional, màs humano, talentoso y cercano, que ha sabido conocerse y no cruzar los límites de la cordialidad y los modales y ha estado a la altura del sitio al que representa. Ojalá mas profesionales como él.

Enhorabuena a todos ustedes, sepan que nos hicieron felices, que lo recomendaremos y que volveremos.

Cada vez tengo màs claro que menos es màs, no solo en la gastronomía, creo que...

En 2016, el colosal mercado japonés de Tsukiji se trasladó a la isla artificial de Toyosu, en la bahía de Tokio. Sin comparación posible, Mercamadrid es grande y hace que, quien más quien menos, haya escuchado eso de que Madrid tiene el mayor puerto de España, pese al sarpullido que esto provoca en el litoral. En cuanto a facturación es verdad, pero ¿qué ocurre con la calidad del género? ¿Y el precio? Es posible que la calidad sea competitiva, pero la relación con el precio no lo es. O no lo debe ser.

Viene esto a cuento de que es muy difícil comer en un restaurante “de pescado” en Madrid por menos de 100€ por persona. Esto, dicho en Garrucha, Vigo o Isla Cristina causa risa, cuando no cachondeo.

Cuando escribo esto, el quilo de carabineros 12-15 en la pescadería de ECI está a 66€. Un carabinero = 5€ (si lo compro yo en ECI). El precio de un carabinero en el plato de Bistronómika se multiplica por seis. Como poco. De la misma forma un quilo de tomates “premium” cuesta 5€/kg. Un tomate = 1€ para mí. El precio de un tomate en el plato de Bistronómika se multiplica por 18. Mínimo. Y el de una alcachofa o un pimiento, igual.

Es sabido que en los restaurantes de producto como los asadores, por ejemplo, el coste de la materia prima es enorme, para conseguir márgenes muy por debajo de los de un italiano. Para mí el precio hace efecto halo sobre todo lo demás. No visites este sitio si no te sobra el dinero o si no estás celebrando algo. Es imposible comer aquí, como en otros por el estilo, sin pensar en la factura. Una anchoa (1) con sus escamas 7,50€ y una gilda con atún 8€. Una alcachofa (un corazón) con erizo 18€.

Bistronómika es un restaurante de lujo y como tal cobra. Además, tiene clientela que lo paga y no hay más que hablar. Yo no puedo/quiero, pero eso no me da derecho a desprestigiarlos.

Por lo demás, el local es pequeño, agradable y luminoso. Hay una pequeña barra a la vista con el producto del día donde trabajan dos cocineros. No hay música audible y el servicio es profesional aunque poco informado. El pescado del día es excelente, la cocción adecuada y los acompañamientos inalcanzables. Mención especial para el pan, reciente, templado y recién cortado.

Conclusión: el próximo "de pescado" en Isla. Hasta entonces caballa, sardinas y lubina...