Restaurante Membibre — Restaurant in Madrid

We ordered the long degustation menu. Since this changes with time there is no point in going through it in detail. It consists of 15 dishes: 5 appetizers (counting the butter with bread), 2 veggies, 2 from the sea, 3 metas, and 3 desserts (one of them a cheese sampler). Dishes were a creative and often involved mixed of very good quality ingredients of traditional Spanish cuisine with a twist. Let me just give one example, my wife, who would not normally order sweetbreads thought these were delicious (in a reduction of its own juice with a "salsipies" sauce). One of the fish and one of the meat dishes were too big for a degustation menu, so beware it may be too filling (we shouldn't''t have finished those). We accompanied this with a bottle of red, from the last section of their wine chart which has special collections that are however not pricy (ours was 50EUR); the waiter recommended it and we thought it was superb.

The restaurant has a front section wit h"hight tables" for small dishes. We sat in the back room which is for proper dining. They also offer a short degustation menu and one can order a la cart. The service was fast and friendly, very professional. The place is decorated simply but attractively. Noise level was low (except for one waiter that had a loud voice -not the one serving us). We are certainly...

Cuando después de 5 años siendo cliente vuelves a cenar y te encuentras que tu mesa para 6 reservada hace tres días, es en realidad una mesa de 4 pegada a la pared donde "a presión" han metido 2 cubiertos adicionales, solicitas un cambio, te responden que no hay opción, propones al menos dos alternativas viables modificando la orientación de la y te responden que no es posible y les dices que si no te dan una mesa donde las 6 personas podamos cenar con la comodidad y el espacio necesaria o de lo contrario te vas y te responden que te vayas, puedes hacerte a la idea de que eso no es un restaurante sino un sitio de comidas sin categoría ni orientación alguna a cliente. La actuación del jefe se sala, una persona borde, antipática, altiva y hasta incomprensiblemente carente de amabilidad alguna, es el reflejo de lo mal orientado que va ese lugar desde hace meses, donde el cliente ya no es el motivo de la existencia del establecimiento, sino que es un ente que ha pasado a un lugar secundario y que según "la casa" debe aceptar lo que le pongan, le hagan o le digan. Desde que el ya no tan nuevo jefe de sala entró en el negocio, la calidad de la atención ha caído en picado dejando tan lejos que ya ni se recuerda, la calidad de atención que se recibía cuando Manolo estaba en sala. Penoso favor que este personaje ha hecho al negocio. Si no se lo carga él lo hará Víctor, quien parece no haber aprendido que el cliente de un buen restaurante no va a el sólo por la comida sino para estar a gusto en un lugar al que va pagando por recibir calidad, trato y servicio. Víctor no sale de la cocina, como persona que huye del trato con el cliente, como si le diera miedo verlos y cuando en este desencuentro le dijimos que no estábamos dispuestos a cenar en una mesa donde no había espacio para que los seis pudiéramos cenar a gusto, su respuesta fue tan cortante como "pues váyanse". Así de simple. Sólo mostró interés cuando le respondí: Pues atento a lo que escribiré. Que poco aprendió de la orientación a cliente tras su paso por Zuberoa y Etxebarri. Si eso lo hubiera hecho allí, sus prácticas hubieran acabado de golpe. ¿Acaso no se han enterado que a los restaurantes se va a disfrutar, sobre todo si al final de la cena la cuenta es de más de 80€/persona?: Pues aquí parece que no les preocupan las condiciones de confort y que la idea que se ha impuesto es que eres un afortunado por tener la posibilidad de comer es esa casa y que tendrás que aguantar lo que te echen. En lo que a mi respecta, este establecimiento ha quebrado. Iré a disfrutar de la buena comida en alguno de los cientos de buenos restaurantes que quedan en Madrid donde saben cuidar del cliente. Por cierto: Otro detalle que muestra el poco cuidado que ponen en cuidar los detalles, fue el encontrar un pan duro tirado en el suelo...

Un restaurante conocido por la zona y con muy buena fama. Para mi la experiencia fue bastante buena, sin embargo hay algunas cosas que hacen que, en mi opinión, no alcance las 5 estrellas. La decoración del sitio es muy original y agradable, el trato de los camareros inmejorable y un ambiente cómodo y familiar. Te obsequian con un aperitivo antes de empezar (punto a favor). El precio de los platos es alto, sin embargo la calidad de los mismos da la talla y alcanza las expectativas sin problema. En mi opinión las raciones se quedan un poco escasas: pedimos unos puerros (para mi bastante escasos, no venían más de 5-6 trocitos, aunque de sabor estaban muy buenos) y tambien 2 ensaladas de tomate y sardina (la sardina deliciosa y la cantidad correcta, pero tan solo 6 trozos de tomate por plato. No cuesta nada poner un tomate más que no se va a arruinar el negocio). De plató principal elegimos la chuleta (el precio por kilo es de 70€, de crianza propia) y sin duda fue un acierto al completo. Para mi estaría en el top 3 de mejores chuletones que he probado en mi vida y lo recomiendo sin dudarlo. El único fallo de este plato es que no viene con patatas y el sitio juega con ello al cobrarte 4€ por bol con unas pocas patatas fritas que no tienen ningún misterio (un punto bastante en contra que da una imagen de cutrez que el sitio no merece. No cuesta nada poner unas patatas fritas al lado de la carne cuando estás pagando 70€ o más por el corte y no hagan el feo de cobrarlas aparte encima caras y pocas). El café te lo acompañan de unos pequeños dulces que estaban riquísimos. Un detalle muy bueno por su parte. En conclusión: me gusto el sitio, volvería a ir siempre siendo consciente de que el objetivo principal es probar el chuletón que esta increíble (con patatas aparte claro está) y si quieres algún entrante si vas con hambre, pero sabiendo que vas a tener que pedir varios. Recomendaría aumentar un poco la cantidad de las raciones ya que hay muchos sitios parecidos al estilo del Membibre que por el mismo precio comes más o pagas menos por comer parecido. Adjunto foto de la cuenta y uno de los dos platos del...