Centro Comercial Martiánez — Attraction in Puerto de la Cruz

The stores in here are fairly priced. It's very complete, it even has an optician which served this tourist very well. There's also a supermarket on floor -1, and it has a huge assortment, it's inexpensive as well. As a Dutchwoman it's a meat and cheese paradise for me. A whole package of chicken fillet slices, for €1,50! I haven't seen that in the Netherlands for 10 years maybe. That same package with its contents (it was like 500 gr) would've cost more than €5 in the Netherlands. In the Netherlands it's like 100-150 grams of chicken slices, for €2,50-€3. Jep. As normal as a supermarket is, the prices were something to behold and admire. I would have at least a €100 left of my usual monthly grocery target if I had a supermarket around with the...

Now is a fairly busy shopping centre after suffering a slight decline in recent years. Such a shame that there are so many empty shops on the top floor, however, there has apparently been an injection of cash from the owners? enabling some development work to be carried out thus improving the situation. I only hope that this will not be used as an excuse to raise the unit rentals causing more hardship to existing traders as so often happens. The clothes outlets, electronics and jewellery shops on the lower floor continue to offer value for money while the Mercadona supermarket is ever popular with tourists and residents alike. We often shop there for groceries and the like, thank goodness there is a convenient taxi...

Reseña del Centro Comercial Martiánez: Una Llamada a la Modernidad

Ah, el Centro Comercial Martiánez en Puerto de la Cruz, ese bastión de compras y comida que nos ha acompañado a lo largo de los años. Aunque uno aprecia su encanto tradicional y su vista al mar, es hora de admitir que el tiempo ha pasado y, al parecer, el Martiánez se quedó en la década pasada.

Entrar al Martiánez es como retroceder a un tiempo en el que la tecnología se limitaba a los teléfonos con botones y los videojuegos no eran más complejos que un Pac-Man en 8 bits. Aquí, si esperas encontrar la última moda en gadgets tecnológicos, te arriesgas a salir con un televisor de tubo. En lugar de una tienda de electrónica moderna, te topas con el equivalente comercial de una máquina de escribir.

Y hablando de entretenimiento, el centro parece tener la misma cantidad de opciones que un bingo local. La zona de ocio se limita a unos pocos videojuegos y a un cine que aún proyecta películas en 2D como si fueran el último grito de la tecnología. ¡Qué innovación!

Pero lo más preocupante es la ausencia de librerías. En una era en la que todos deberíamos estar sumidos en la lectura digital, el Martiánez parece haber olvidado que los libros también son un negocio. No hay lugar para una librería moderna, ni siquiera para un rincón acogedor donde uno pueda hojea un buen libro mientras disfruta de un café. En su lugar, nos ofrecen estantes vacíos y vitrinas con artículos que parecen haber sido olvidados por el paso del tiempo.

En resumen, el Centro Comercial Martiánez, aunque sigue siendo un querido punto de encuentro, parece necesitar una actualización urgente. Una dosis de tecnología moderna, un poco más de entretenimiento actual y, por favor, una librería que no sea un recuerdo de tiempos pasados. Después de todo, el presente debería ser tan vibrante como el paisaje...