Mareaviva — Restaurant in Seville

Sevilla is one of my favorite cities in Andalucía, partly due to how many amazing restaurants and bars it houses! I’ve been exploring the Nervión area recently and have tried Mareaviva for the first time last Saturday - we wanted to meet with friends and reserved a table outside for dinner.

From the very beginning we had a lot of fun ordering, thanks to our waiter Rafa, who explained all the dishes very well, adding a touch of humor here and there. The whole menu looked amazing so we went for 5 different dishes to create almost a “degustation” experience: patatas hojaldradas, canelón de aguacate, tartar de steak sobre pan de cristal, ortiguillas (a special from that day), and all the possible flavors of their croquetas (que no me falte mi croqueta!). The food was delicious and super aesthetically served - I’m adding a few photos of the dishes so you can see for yourself.

Summary: I’d highly recommend going to Mareaviva (bonus points if you’re taken care of...

The food is very good, especially the grilled octopus leg. It's one of the most chewy ones I have ever tried. The table service is also really good. They service food by order and changed plates from seafood to meat. The only thing I was a bit surprised about was the table arrangements. I called to make a reservation for 4 people and when I arrived, they put us at a table for 2 people (quite crowded) and also below the AC. So I asked if they could move us to a window one which is bigger and less cool. They said no because all the tables were reserved by people who went there and specifically asked for that table for their reservation while if you reserve by phone, they won't bother to give you the option. So they offered to turn off the AC. But later it turned out that the guest for the window table I asked didn't even show up. They have their rules for sure but something rarely...

Terraza muy amplia con gente esperando fuera para sentarse con lo cual piensas que va a ser una experiencia increíble, pasamos a sala e igual de lleno, se ve que el local tiene mucho éxito, hasta ahí todo perfecto. Tardaron más de 10 min en tomarnos la bebida porque en sala un solo camarero no daba abasto el pobre con tantas mesas mientras su compañero hablaba en la puerta con una conocida, por fin deciden ponernos la bebida el chico muy simpático nos atiende y toma nota todo lo rápido que puede, demasiadas mesas para tan poco personal en sala. Empieza la desilusión, pedimos el hojaldre de bravas (6€) esperas mínimo que sea un picoteo, 4 bastones de patatas con 4 gotas de salsa en lo alto, nos quedamos mirando y decimos bueno habremos elegido mal, pedimos las tostas de atún, la calidad muy buena, el atún espectacular, por 5,50 merece bastante la pena. Seguimos con el variado de atunes… otra desilusión más, 6 taquitos de arroz frito con una cantidad tan ínfima de atún encima que parecía de risa (no hicimos fotos por vergüenza ya) estaba bueno pero por 14,50 me pareció que ya era una cámara oculta, la cerveza en copa no conseguía estar del todo fría, lo comenta la mesa de al lado y coincidimos en el pensamiento, el otro camarero dice que está bien, le enfría el vaso y le trae otra… sigue sin estar fría la cerveza… 22:35 nos dicen que se han quedado sin copas de cerveza, que esperemos que vayan al bar de al lado a pedir más. Pedimos el plato de pluma ( bastante pasada por favor, añado) por 15€ nos ponen una cantidad que parece más bien una tapa, no comentamos el punto de la carne ( venía al punto) porque ya dábamos por nefasta la experiencia, pedimos la cuenta y se acerca el camarero a ofrecernos unos chupitos de parte de la casa, no tiene la obligación pero se le agradece el detalle, nos mira como pidiendo disculpas por tardar, todo lo contrario, nosotros agradecidos por todo lo que corrió para intentar atendernos rápido. Nos tomamos los chupitos entre risas quitándole hierro al asunto comentando que después de una cuenta de dos personas de 75 euros, no sería mala idea pasarnos por cierta cadena de comida rápida por unas hamburguesas. 3,20 de pan y picos (1,60 por comensal) que eran dos bolsas de picos y un cuscurro de pan más pequeño aún que los bastones de patatas. En fin, espero que la experiencia esa noche solo fuera así de nefasta para nosotros, dudo mucho...