Esta escalera unía el Palacio del Generalife con una pequeña mezquita situada en los jardines altos. El sultán podía así subir dicha escalera y a la vez hacer sus abluciones previas a la oración, pues el agua de la acequia real, al parecer, se dejaba que bajara a voluntad bien por los pasamanos a los lados de la escalera, o por un canalillo que unía los escalones con remansos en sus descansillos, o por ambos a la vez, permitiendo lavar manos y pies y asombrar con estos juegos a los visitantes o a la corte. Todo ello, resuelto con unos materiales sencillos, como las tejas de los canales, pero de modo ingenioso y efectivo. Aunque se hayan perdido algunos elementos como el mecanismo de distribución del agua, su efecto de conjunto nos ha llegado. El lugar de oración islámico, parece ser que fue sustituido por un mirador romántico en 1836 por el Marqués de Campotejar. Todo un lujo para la cultura árabe, que, en esto del culto al agua, como en algunos otros detalles, nos traen a la mente la novela y la película "Dune". Los sentidos se ven agasajados con la sombra de los árboles, laureles, que cubren la escalera, los murmullos del agua que baja, el frescor y la humedad creada y por supuesto, las...
Read moreEsta escalinata protegida por una bóveda de laureles, está diseñada de forma acorde con los usos del sultán medieval. El objetivo principal de dicha escalera era comunicar el palacio del Generalife con una pequeña capilla situada en lo alto de la colina. El acceso, en pendiente, representaba un problema que el alarife nazarí supo salvar con singular maestría: la escalera, interrumpida por varios descansillos de planta circular presididos por fuentes bajas, tiene como pasamanos dos canales hechos con humildes tejas y ladrillos y encalados. Por ellos discurre el agua de la Acequia Real, abrupta e irregularmente produciendo una sinfonía de tranquilidad y reposo, y humedeciendo el ambiente, todo bajo una cerrada bóveda de laureles. El espacio resultante, umbrío y fresco, servía a la vez para efectuar las abluciones previas a la oración, y de esa manera, se convertía en el sahn que toda mezquita requiere. La escalera es toda una lección arquitectónica de respuesta a un condicionante sabiendo hacer de necesidad virtud y con los...
Read moreTucked within the lush gardens of the Generalife, the Escalera del Agua is a poetic blend of architecture and nature. As we climbed the moss-lined steps with water flowing gently along the handrails, it felt like ascending through a living, breathing landscape. The sound of trickling water accompanied every step, creating a serene rhythm that enchanted both adults and children alike. A quietly magical moment within the Alhambra.
Escondida entre los frondosos jardines del Generalife, la Escalera del Agua es una fusión poética de arquitectura y naturaleza. Mientras subíamos sus escalones cubiertos de musgo, con agua fluyendo suavemente por los pasamanos, sentimos que ascendíamos por un paisaje vivo y palpitante. El murmullo constante del agua acompañaba cada paso, creando un ritmo sereno que encantó tanto a adultos como a niños. Un momento discretamente mágico dentro de...
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