Senza Glutine di Grosso Napoletano — Restaurant in Barcelona

We decided to go here because a friend discovered it and my wife is gluten intolerant. We were a group of 5 and booked a table for 7pm on a Saturday. The Good stuff: Best gluten free pizza base I’ve tried anywhere. Fluffy. Food came out quickly. Food was tasty …And that’s it.

The not so good: The restaurant has a late night bar/club feel to it when entering. Very dark atmosphere. We didn’t like it. You could hardly see what you were doing in the toilet. The first waitress to serve us was grumpy and unhelpful in taking our drinks and explaining the menu. No homemade drinks offered. Your options are water, commercial juice and fizzy drinks. There’s even redbull on the menu!! I didn’t order a starter, most of which are around 11eur each! Almost every pizza has animal on it. 4 of us are vegetarian. We were told they would remove the meat, but if we wanted something instead we would be charged 2eur extra. (Unclear if that’s per item or per person.) Quite unfair since the pizzas are so expensive anyway. And very unfair for vegetarians. When we had ordered we were casually told we only had the table for an hour before the next group arrived. You can imagine how uninvited we all felt at that point. Considering the restaurant was largely empty and remained that way for most of our time there. Starters and mains arrived at the same time. The waiter didn’t bother asking whose dish was who’s. He just put them down anywhere and walked away. My mushrooms were all clumped on one side. I peeled them apart and spread them evenly myself. I had 5 cubes of vegan cheese spread over my pizza. Lame… No one returned to ask if the food was ok or if we needed anything else. When we had finished the waiter cleared the table and bought us our bill a few minutes later. We were not offered dessert. We felt rushed the whole time we were there.

Summary: My wife has real problems finding gluten free pizza that’s tasty and healthy. Her pizza was ok and it’s the only reason I’m giving it 2 stars. As one of our group put it “The pizza was good. But everything else around it was lame...”

Better to order home delivery than to dine there. The atmosphere is cold, unfriendly and dark. Nice ingredients on pizza, but small and stingy. More options needed, especially for...

Disappointing Experience Despite a Promising Start

We visited Grosso Napoletano in Eixample yesterday for lunch with a group of 20 colleagues. The restaurant is in an excellent location, recently refurbished, and visually very appealing. Unfortunately, that's where the positives end.

Despite the restaurant being nearly empty, the staff were unfriendly and unhelpful from the start. When taking our orders, they casually mentioned that some items (like provolone) listed on the menu were unavailable, then walked away without offering alternatives or suggestions. Crucially, no one informed us about the daily menu — a fixed option for €14.95 that includes a pizza, soft drink, and coffee.

I ordered a four-cheese pizza (missing one cheese), added salami, a Coca-Cola Zero, and an espresso — exactly what the daily menu includes. Several of my colleagues did the same. However, no one explicitly said “menu del día” when ordering, and the staff never clarified or reminded us of that option.

When it was time to pay, a single bill was presented for the entire group, with every item charged individually. When I asked why I wasn’t charged the menu price, the response was simply: “You didn’t ask for it.” I explained that I hadn’t been informed about it at all, and their response was indifferent. I ended up paying €23.80 for something that should’ve cost €14.95.

I don’t mind the extra €8 — and the pizza was fine (nothing amazing) — but the way the staff handled the situation felt dishonest. It gave the clear impression that they saw a large group and took advantage by avoiding the cheaper menu option unless explicitly requested.

Big red flag: If you plan to eat here, don’t expect the staff to guide or help you. Check the menu online, read the small print, and be very specific — because the service is more likely to mislead than assist.

P.S. As a joke: the name of the restaurant is Grosso Napoletano, and although I didn’t see any Neapolitans there, I was definitely treated like I was in Naples — we...

Nos encanta el restaurante, las pizzas son buenísimas, venimos desde Palma de Mallorca y siempre hacemos parada para poder disfrutarlas porque son increíbles. He de decir que hasta ayer, el servicio, aunque estuviera colapsado SIEMPRE había sido de 10, pero lamentablemente ayer no vivimos ni por asomo una experiencia similar.

Reservamos en su web, como siempre, a las 20 horas, llegamos puntuales y apenas había gente en el restaurante. Siempre nos ofrecen las mesas con sofá porque venimos con dos nenes y es mucho más cómodo. Esta vez, nos recibió una chica de pelo largo ondulado que no fue muy agradable, pero no le dimos importancia. Nos sentó en una mesa al fondo apartada, para seis personas. Al sentarnos, le preguntamos si por favor, aprovechando que éramos de los primeros, podría colocarlos en una de las mesas con sofás circulares. Porque con los pequeños es mucho más cómodo y les encanta. De forma cortante nos comunicó “No, es que están ya reservadas”, fue algo violento y no lo entendimos.

Pasaron unos minutos y al venir a tomarnos la comanda, le consultamos cómo deberíamos proceder en futuras ocasiones para poder reservar esos asientos, si las reservas son online y no hay opción. A lo que literalmente nos respondió “no, esos asientos están ocupados y reservados para el uso exclusivamente de 3 personas, cómo comprenderás no voy a poner a tres personas en esta mesa de seis, les daré el sofá”. Nuestra cara fue de asombro total porque ni a los ojos nos miraba, ni disculpas, ni nada.

Las mesas con sofá circular, estaban preparadas con seis platos, no entendíamos nada.

Estuvimos en esos asientos muy incómodos, la verdad sea dicha, habían preparado la mesa con platos sucios, lo comentamos y se los llevo, prepararon la mesa con cubiertos pero sin servilleta alguna en el cubilete, estuvimos esperando 15 minutos y acudimos al mostrador para poder pedir las servilletas y un agua, para poder empezar a comer las pizzas.

Tras terminar, esperamos desde las 20:40 hasta las 21:08 h, que también nos levantamos para solicitar si podrían retirarnos los platos y podríamos ordenar los postres, porque sí que nos había comentado esta misma persona que la mesa debería estar disponible a las 21:30 h, pero no se acercaba a nuestra mesa. Sí que la vimos pasear, hablar de muy malas formas a todos sus compañeros y perder el tiempo, mientras el resto del servicio sí atendía a sus zonas. Cuando acudió por fin a tomar nota, ni una disculpa por la demora, ni nada, en ninguno de los casos.

Paralelamente a esto, las mesas con sofá continuaban disponibles hasta las 21:18 horas, que sentaron a un grupo de 4, que ahora sí podía usarla. Nuestra cara era de asombro total porque escuchamos a las personas que se sentaban y no todas tenían reserva.

Comentamos con otra trabajadora, si podíamos hablar con el genrente, pero no se encontraba en el local en ese momento. A esta trabajadora sí le comentamos todo, y fue muy amable, pero no daba crédito al trato recibido.

Finalmente, nos acercamos a abonar en efectivo la cuenta, de nuevo nos atendió la primera trabajadora (pelo muy largo ondulado), que ni nos miraba a los ojos (pensamos que por lo absurdo de las molestias que tan gratuitamente había ocasionado), tomó el dinero y en cuanto depositó el cambio, sin despedirse, ni gracias, ni nada, se giró y empezó a gritar “SE ACABARON LOS PAGOS EN EFECTIVO!!! NI UNO MÁS POR HOY!!! LO HABÉIS ESCUCHADO!!!”.

BOCHORNOSO todo, sonreír, tener educación y tratar bien a las personas (tanto a clientes como compañeros), debería ser un mínimo.

Como les comentamos, repetiremos porque jamás habíamos tenido semejante experiencia. Pero de encontrarla de nuevo, pediremos que nos atienda cualquier otro personal de servicio. Y de repetirse, pondremos queja formal.

Les dejo foto del plato en cuestión, de las mesas vacías de cuando llegamos (20:08 h) y la mesa de 4 que sí pudo sentarse (21:17 h). Y de sus...