Asador Gerardo — Restaurant in Madrid

Lo conozco desde que iba con mis padres de niño harán ya veinticinco años , diría que más . Tremendamente decepcionado con el servicio del restaurante , es muy desagradable el que discutan puntos del servicio entre clientes aparte de discusiones propias de su puesto o su organigrama , pero lo que más me ha molestado es que cuando uno está gustando el dinero , que no es precisamente un restaurante barato , estén presionando casi retirando los platos cuando aún estás masticando los mismos , retirándolo todo de la mesa , presionando para despacharnos mientras estaban más pendientes del montaje de la sala para el servicio del día siguiente imagino cuando eran creo que , sentandonos a cenar a las 22:30 , una hora digamos que cristiana . Se me cae un mito en la restauración y es una pena , porque el trato del maitre fue muy agradable , pero quién está representando a la empresa que es el servicio de camareros fue muy lamentable . No le faltó reírse en mi cara a la camarera cuando me trajo la cuenta que no se cortó siquiera en disimular un minuto , estoy convencido por la velocidad que la tenía no solo preparada sino en la mesa a mi espalda en alegar que estaban cerrando la caja , a lo que devolviendo la risa le mencioné que si me apeteciera un whisky me invitaría ella dado que la caja o la cajera ya estaban "cerrados" y bromeó con que no le había tocado la lotería . Una pena de verdad el pésimo y desafortunado servicio de éste mítico restaurante madrileño . El aparcacoches como siempre educado y profesional , y la cocina deliciosa ,...

Reservamos una mesa para cenar cuatro personas el sábado a las 22.30, llegamos puntuales, dadas las circunstancias, pedimos si podíamos cenar en la terraza, no hubo ningún problema, para empezar, la terraza no está acondicionada para el frío que hacía, pero es cierto que fuimos nosotros los que pedimos cenar fuera ....la persona que nos atendió, empezó metiéndonos prisa diciendo que la terraza a las doce de la noche tenía que estar recogida, teniendo en cuenta que habíamos hecho la reserva a las diez y media y nadie nos había advertido del horario ya nos extraño...nos sirvió los entrantes y los segundos, y le avisamos para pedir el postre, ya nos dijo que rapidito que tenía que recoger , no eran más de las 23,45....pedimos el postre y en ese momento nos dijo que tenía que recoger y que nos teníamos que tomar el postre y los cafés dentro del restaurante, eso ya sonó mal, nos hizo levantar y al entrar al local, directamente nos dijeron que NI POSTRE NI CAFE, que la cocina estaba cerrada....debía de ser solamente para nosotros, ya que el restaurante estaba lleno de gente, ... directamente nos sacaron el datáfono para pagar, que fue lo que hicimos, pagar y marcharnos .....con lo cual el resumen de esto es que es un sitio nada recomendable, ni por las formas ni por el trato, muy mala...

Lamentable y desagradable experiencia. Es una pena que un local al que tantas veces hemos ido, tengamos que escribir esta nota. Es intolerable que, con la que está “cayendo”, tengan la indecencia de hacer una comunión en su sala interior. ¿Qué ocurrió? Niños sin mascarilla haciéndose fotos, madres en corrillo haciendo las fotos y sin guardar distancia con nuestra mesa,... Al final, por una cuestión de salud y responsabilidad, nos levantamos y nos fuimos (después de darles una oportunidad, avisando al personal pero viendo que no supieron imponerse). Una lástima ver que un sitio con tan buen servicio, tan buen material, tan agradable sitio, tengamos que sufrir una situación tan desagradable como irresponsable con el momento actual. Ah, por cierto, con mucha educación expusimos nuestros motivos, y pagamos nuestras consumiciones. El restaurante simplemente nos ofreció invitarnos a las cervezas. No, señores de Gerardo. Esa no era la solución. El problema es no saber decir “NO” a la petición de un evento como una comunión en un salón interior, uno de los mayores focos y motivos de contagios; y luego no querer ser contundente con aquellos clientes que no se comportan de forma responsable y respetuosa con los demás comensales. Una...