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National Archaeological Museum
4.7
(9.9K)
Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa
4.5
(2.4K)
Descubrimiento Garden
4.3
(187)
Museo de Cera
4.1
(4.5K)
Restaurante Bel Mondo
4.7
(16.5K)
Casa Dani
4.5
(4.6K)
El Pimiento Verde Lagasca
4.4
(1.2K)
$$$
Ichikani Madrid
4.9
(1.6K)
We arrived with a reservation, but the receptionist couldn’t find it, probably because they forgot to note it down. First mistake.
They seated us at a table with extremely low chairs, so the plate was almost at shoulder height. We had to ask for a table change because it was very uncomfortable to eat like that.
My husband is celiac, and although we informed them, they placed bread on top of a jug and then poured the water from our bottle into that same jug, so he couldn’t drink it. They also served a house appetizer containing gluten, and he didn’t receive any gluten-free bread, yet they still charged €4.50 for it. Very unfortunate.
We ordered two grilled fish (sea bream and turbot), but they confused the sea bream with a “virrey” fish, and to our surprise, they brought them drenched in a vinegar sauce, which wasn’t mentioned on the menu nor by the waiter. We had to eat one of the fish unhappily, while they changed the other one as we don’t like vinegar, which caused a significant delay. At no point did they apologize or offer anything to make up for this major mistake. Each fish cost €110, supposedly based on weight, though curiously, both weighed the same.
We also ordered artichokes, which were good but cold, and a lobster “a la menorquina,” which was delicious.
When we asked for the bill, they didn’t bring the plate of sweets that they served to everyone else. Another poor gesture.
They brought bottles of water without asking if we wanted them; in total, 5 bottles of sparkling water for 3 people… Very unfortunate again.
The bathroom door was stuck and the bathroom wasn’t clean; I found unflushed urine.
The total bill was €460 without alcohol, desserts, or coffee. The price-to-quality ratio is one of the worst I’ve encountered in Madrid, mainly due to the many service issues, although the waitress who served us was friendly. It was worth trying, but I...
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He trabajado en cocinas de nivel y sé lo que debería ofrecer un restaurante que cobra más de 150 € por comensal.
Por eso, tras mi breve paso por El Gran Asador Lecanda, siento la responsabilidad de compartir una valoración profesional, técnica y respetuosa, pero clara.
Emplatados sin técnica ni criterio
Los platos carecen de armonía visual. No se utilizan brotes, ni contrastes, ni volúmenes. Se emplata en números pares, error básico en cocina profesional, y sin intención estética. Más que minimalismo, lo que transmite es improvisación y falta de formación técnica.
Conservas industriales en un menú de alta gama
Pimientos del piquillo de lata, tomatillo verde en conserva, alcachofas confitadas envasadas al vacío, industriales incluso la salsa kimchi es de origen industrial, sin elaboración propia ni fermentación casera. Los pimientos de piquillo, en particular, evidencian su origen al servirlos todos con idéntica forma y altura, como si hubieran sido troquelados por una máquina: señal clara de un producto de bote. Para un restaurante que presume de producto y tradición, este abuso de conservas es preocupante.
Las angulas no son frescas
Lo que se presenta como angula fresca recuerda, por textura y presentación, a productos congelados industriales como los de la marca Aginamar. Vienen en sobres individuales, tienen una textura gomosa y sabor plano. No cumplen ni de lejos con las expectativas que generan.
Carnes mal cortadas, con pérdidas notables
Una vez fuera de la parrilla, las piezas se cortan sin criterio, dejando mucha carne adherida al hueso. Este desaprovechamiento, en un restaurante especializado en carnes premium, no solo es poco profesional, sino una pérdida directa para el cliente.
La manteca del cochinillo se aplica incorrectamente
En lugar de fundirse y aplicarse en caliente —como requiere la técnica tradicional para lograr una piel crujiente y brillante—, se añade en estado sólido, como si fuera mantequilla fría. El resultado es una cobertura dispareja, sin el acabado que se espera en un plato estrella.
Fumé de pescado con sabor a nada
El fondo de pescado (fumet) carece de estructura, profundidad y cuerpo. Más que una base sabrosa y gelatinosa, parece agua con un leve tinte marino. Inaceptable en un restaurante que trabaja producto del mar y que dice cuidar la técnica.
Bilbaínas excesivas y mal ejecutadas
Los pescados llegan literalmente nadando en aceite. La bilbaína, que debería aportar un toque cálido y aromático, se convierte aquí en una piscina de grasa de más de medio centímetro. Un mal uso que tapa el producto y satura el paladar. Nada que ver con una bilbaína clásica, sutil y armoniosa.
Ensaladas sin alma
La llamada “ensalada verde” es simplemente lechuga romana con cebolla. Sin gracia, sin un aliño trabajado, sin matices, sin un elemento que eleve el plato. Algo que cualquiera podría hacerse en casa en tres minutos, pero aquí se cobra como alta cocina.
Conclusión:
Este restaurante no está a la altura del precio que cobra. Hay una falta clara de técnica, aprovechamiento del producto y visión culinaria. El marketing no puede ocultar la pobreza conceptual de la carta ni el descuido en la ejecución.
Como chef profesional, lo que he visto no me parece aceptable para un restaurante de...
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I came to El Gran Asador Lecanda with very high expectations, especially since the restaurant recently earned a Michelin star. Unfortunately, the experience fell short in a few key areas.
I started with the King Crab leg — while the cooking itself was perfect, the crab tasted a bit fishy. The butter that accompanied it arrived ice-cold instead of melted, though the staff did replace it when I pointed it out.
For the main, I ordered the aged beef sirloin, asking for it medium, but it was served rare. While the quality of the meat itself was good, the undercooking made it overly chewy and hard to enjoy.
On the positive side, the staff were attentive and polite throughout. However, with the Michelin recognition, I expected a flawless experience — small but fundamental mistakes like these are hard to overlook at this level.
Overall, while there were glimpses of quality, the execution didn’t meet the standard I...
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