Junk Burger

Bueno pues voy a dar mi opinión, tómese como algo meramente subjetivo, y que la valoración es estricta porque se hace en función al premio que tiene su producto. Nos gustan mucho las hamburguesas y mi hijo llevaba tiempo pidiéndome venir a probar la campeona de España. Quizá la expectativa ha contribuido a la nota final que doy, pero realmente ha sido una experiencia decepcionante. Lo primero de todo, en relación con las cosas buenas, tengo que decir que la decoración del local es una pasada, el trato del personal es bueno, y las coca colas son en botella de 35cl, cosa que se agradece. Algo que personalmente no me gusta, y veo que es tendencia en algunos sitios, es la moda de las mesas altas. Me resultan incómodas y hacen que la experiencia sea poco relajada. Pero bueno, si vamos al lío sobre qué me ha parecido la mejor hamburguesa de España, tengo que decir que era la primera Smash burguer que probaba, y me apetecía mucho porque sobre el papel el concepto me atraía. La realidad ha sido diferente, los toques crujientes de la carne la verdad que no me han convencido, pero sobre todo lo que ha ocurrido es que he visto un gran desequilibrio. El Bacon crujiente, muy hecho y muy ahumado, unido a una excesiva y espesa presencia del queso y de la salsa, hace que no se aprecie el sabor de la carne. Mi hijo al principio como era la mejor de España estaba intentando justificar lo buena que era, pero luego no se la ha terminado (código rojo!), y me ha reconocido que no le había gustado tanto y que tenía demasiada salsa. Percepciones personales, porque si ha sido declarada la mejor por algo será. Más allá de eso decir que la carta se compone únicamente de un entrante (tequeños, nada memorables y con una salsa que no nos gustó), 4 tipos de hamburguesas y dos postres (además de las patatas fritas que se piden aparte de las hamburguesas y que estaban muy buenas). Muy poca variedad, aunque uno sabe a lo que va. En relación con el postre decir que también tenía muchas ganas de probar la afamada cheesecake de Montchis, y que también me ha resultado un poco decepcionante. Digo lo mismo, quizá por la expectativa. Lo primero, se sirve templada, y con el calor desde luego lo que pedía el cuerpo era algo frío. Es cremosa y no está mal, pero tampoco es nada que uno no vaya a olvidar. Cara (8€), pero abundante eso si. Los precios son elevados para este tipo de comida, sobre todo teniendo en cuenta que si quieres patatas se pagan aparte, pero bueno, si vas a probar la mejor hamburguesa de España creo que merece la pena pagar esos 13,9€ y sacar tus propias conclusiones. A mi particularmente no me ha gustado. A la vuelta de la esquina del local está casualmente el Frankies Burguer, premio a la 3ª mejor hamburguesa de España, que me gustó bastante más. En ambos casos locales pequeños y con mucho delivery, no pensados para disfrutar la comida en grupo o simplemente de forma relajada en el propio local.