Creo que, con este tipo de locales con pretensiones y con los precios que tienen, debemos ser más exigentes. En nuestro caso, cuando nos gastamos una cantidad considerable de dinero en comer (unos 100€ la pareja) y no has cometido ningún exceso a la hora de pedir, quiero que todos los aspectos estén a la altura. Pedimos, de beber 1 cerveza de barril (ninguna especial) cada uno y una botella de agua para compartir. 1 croqueta, y a continuación 3 entrantes y 1 principal todo para compartir. Para finalizar 1 trozo de tarta cada uno. Con el pan, prácticamente la cuenta ascendió a 100€. Nada de vinos, ni cócteles, ni platos individuales, ni carnes o pescados caros. He de decir que los pago a gusto si, repito, todo está a la altura.
El sitio es bonito, pero las mesas están muy pegadas las unas a las otras, por lo menos las mesas de 2 (hasta el punto que tuvimos que mover la nuestra para poder sentarnos). Esto, entiendo que también contribuye a que el volumen de las conversaciones esté bastante alto para un sitio de cierta categoría. Los brazos de las sillas chocaban con la tabla de la mesa, lo que hacía que no estuvieras muy cómodo. Se agradece que pongan ambientador en la sala, pero en ocasiones el olor era demasiado potente para estar comiendo. El servicio fue bueno, en los dos únicos parones que hubo llamamos al camarero más cercano y reaccionaron bien. Estas mesas sin ningún tipo de manteles deberían ser limpiadas por lo menos antes de los postres. El pan lo cobran a 1,60 por persona. Se trata de tres clases de panes y unas rosquillas en un pequeño cesto. Me parece perfecto, pero si se cobra por ración y no por cesto, no entiendo por qué no hay un trozo de pan de cada variedad para cada uno. Tanto en el primer cesto como en el segundo no había de todas las variedades para cada persona. La comida, en general, correcta, lo mejor la ensaladilla, muy buena. Lo que nos decepcionó fue la alcachofa, a los dos nos pareció que le faltaba algo más de potencia al sabor, estaba un poco sosa.
En resumen, no es un sitio para repetir, pues en Murcia hay muchos locales en los que puedes comer mejor con precios más asequibles o al mismo nivel de precios pero ofreciéndote una experiencia...
Read moreTodo un imprescindible de murcia.
Había oído hablar desde que abrieron de este local y aprovechamos para hacer una comida de trabajo allí, sin duda una grandísima elección.
Para empezar, el ambiente se presta a todo… trabajo, amigos, parejas… acertarás en cualquier caso, y lo mismo ocurre con los platos, toda una delicia.
Nos decantamos por la croqueta del chef (fantástica); la burrata italiana (que la imagen ya habla por sí sola pero he de hacer una especial mención a los tomates); brioche de panceta ahumada (que dan ganas de tomarte 4); el bocata de calamares (siendo un plato sencillo tiene ese toque especial al ser a la plancha, al contrario que el clásico de calamares fritos, y con una salsa genial); solomillo (lo mejor que se puede decir de un solomillo para mi es que esta hecho como se tiene que hacer.. y este es el caso); tarta de queso (top 3 de murcia para mi… una pasada).
Volveré para probar la torrija de la que he oído maravillas también.
Por último, pero no menos importante, el trato genial, nos quedamos hasta el final del servicio hablando y, aunque nos alargamos un poco de más, en todo momento seguimos sintiendo la hospitalidad del...
Read moreEl restaurante es un sitio bonito, bastante decorado. Fui con mi pareja esperando probar "alta cocina" pero nos decepcionó bastante la calidad de los productos. Los platos elegidos fueron: Marineras (pasables) Caballitos (nos dio la impresión de que eran congelados aunque el camarero nos dijo que no). Paparajote shiso y tartar de gamba blanca. Brioche de rabo de toro (algo seco, quizás necesita más salsa o que la carne estuviera algo más jugosa) Bocatin de calamares (como un pan de bollycao acompañado con calamares, plato extremadamente seco y que se pega en el paladar). Croqueta (buena) Hamburguesa de "chato murciano" ( para nada sabía a chato, puede pasar perfectamente por una mini hamburguesa de de pollo sin más y bastante dura).
Decidimos elegir varias tapas para poder probar más cosas de la tarta pero desde luego, no acertamos. Quizás su fuerte es hacer buenas carnes. El precio total de la cena fue 52 €, lo habría pagado agusto si la calidad hubiera sido buena pero he salido bastante triste por haberme llevado una decepción.
Por otro lado, los camareros han estado muy atentos y agradecemos sus palabras amables en...
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