Al Agua Patos — Restaurant in Bogota, Capital District

The atmosphere is very cozy. I visited the branch on 72nd Street during lunchtime, and it was quite busy, but even so, we were still introduced to the restaurant’s “philosophy” and the differences in their bread types and portion sizes.

I ended up choosing two dishes: a Thai salad and a Togo-sized buffalo sandwich. Unfortunately, the kitchen made mistakes with both dishes. The Thai salad was supposed to have cilantro, but they added mint instead (without asking me). In my sandwich, I had requested the gorgonzola cheese to be served separately (the menu stated it came with four types of cheese), but they neither removed it nor sent it on the side.

After that, I didn’t order dessert, as this lack of attention to detail left me disappointed. My expectations were high, but these small mistakes really brought the...

Ah, “Patos al Agua”, una experiencia culinaria que solo podría describirse como un curso intensivo en paciencia zen.

Llegamos esperanzados a probar esas tostadas en un espacio bonito que te hace pensar que estás a punto de tener una gran experiencia. Pero, ¡oh, qué equivocados estábamos! A los 30 minutos (sí, treinta) finalmente tomaron nuestro pedido. Uno pensaría que después de ese tiempo, al menos los meseros habrían notado nuestra presencia, pero parece que en “Patos al Agua”, el reloj corre con otra lógica.

Pasó una eternidad (bueno, 60 minutos) hasta que por fin llegaron las bebidas. Para entonces, nuestros estómagos ya habían aceptado resignados su destino de seguir vacíos. Cuando, desesperados, pedimos cancelar el pedido (quién necesita comer después de tanto tiempo, ¿verdad?), la administración insistió en que teníamos que pagar todo. Accedí a cubrir las bebidas que milagrosamente habían llegado, pero, por supuesto, eso implicaba otra espera: 15 minutos para traer la cuenta separada, como si hubiéramos pedido la lista de los diez mejores vinos de Francia, no dos jugos y un café.

Y no, pedir ayuda a los meseros no fue opción. Cada vez que intentábamos, respondían con un “ya viene mi compañero”, un personaje mítico que jamás se materializó. Al preguntar por el pedido, la respuesta era siempre un “ahorita indago”, que más bien era el hechizo de invisibilidad de regreso.

Lo más increíble: mientras otros clientes, igual de desesperados, se levantaban y se iban, el personal seguía entregando menús a las personas que estaban afuera en fila, sin avisarles que podían acabar siendo víctimas del mismo círculo de espera eterna. La cocina, por lo visto, tiene todo lo que necesita para sacar buenos productos, pero en logística y atención al cliente… digamos que “colapso” es un eufemismo amable.

Si tienen paciencia, traigan una novela, una manta, y prepárense para ver pasar las horas en “Patos al Agua”. Eso sí, ¡el lugar es bonito! Pero si buscan desayunar y no vivir una novela kafkiana, mejor busquen otros “patos” en...

Super fun food. I've never had anything like it! All different kinds of toast... The serving sizes are decent but not big. I ordered a fruit bowl to share with my friends and I'm glad we did that, as the fruit helped balance the meal.

I had the Necio...it was soo good! Egg on toast with bacon smothered in a creamy cheese. My latte was also good, not too sweet or too strong.

My husband and I also tried the "cheese cake" pato to go. It was like a blackberry mini pie/empanada. It was warm but the middle was still cold. I like the idea, but it wasn't mind blowing.

I would recommend. It's a...