Today was marked by an unpleasant incident in a café, which wasn't related to the food but left a significant impact due to the staff's behavior. After leaving the café, I remembered that I had forgotten my aligners, worth about 2000 euros, on the table. Returning after 5 minutes turned into disappointment: the waiter informed us that they had been thrown in the trash. The situation worsened when an attempt to get details led to an unexpected conflict: the staff refused to help, resorting to threats of calling the police.
This behavior became even more disheartening when my husband approached the bar counter, expecting at least simple apologies. Instead of support or understanding, we encountered unacceptable treatment, which seems incredible, considering the usual practice in hospitality, such as keeping forgotten items like glasses on a separate shelf.
Our travels through more than 20 countries around the world have shown that such treatment is the exception rather than the rule. Everywhere we went, customers were treated with respect and care. Therefore, our rating for this place is low, and it concerns not the quality of the food but the lack of basic human relations and respect. It is sad to realize that the simple attention and empathy that should be standard in any service were completely ignored...
Read moreEl lugar es bonito y tranquilo, los camareros en barra agradables pero la chica que atiende el servicio en terraza … se nota que no le gusta el trabajo y está amargada. Sé lo que es Bilbao hoy en día y sé lo que es un servicio de terraza, lo que no sabía es que las terrazas tienen instrucciones y que pegan un cartel en el cristal las mismas. Tampoco sabía que una cadena de bares no sabía de la existencia de un ratio de camareros por X mesas en terraza, ya que si llevas 15 minutos para que te sirvan 4 bebidas porque al parecer también hay lista para servir en terraza, será porque con 1 camarero no das de sí o porque esa camarera no pone ni un mínimo de esfuerzo en ser un poco ágil y, encima, el problema es que no tienes paciencia. Ver a dos camareros mirar y observar tranquilamente la terraza con mesas pendientes de servir, que entre gente a consumir dentro y ser servidas en milésimas de segundo, y que te digan que lo tuyo aún no está ni servido, pues muy normal tampoco me parece… Me ofrecí a que iba yo a la barra y cogía mis consumiciones pero que estar 15 mins para 4 pintxos y 4 consumiciones pues que no era muy lógico. Ella chica con su toque de prepotencia me dijo que es lo que tiene el servicio de terraza, esto es Bilbao, que es lo que tiene no tener paciencia, que está cansada de que la gente le venga con esas historias y que sino lo que tendría que hacer es irme a otro bar. Las instrucciones para servir en terraza están pegadas en el cristal, que me estaba metiendo o enfadándome con una cúrrela que nada tenía que ver y que si pretendía que me diese la razón no me la iba a dar. Bajo mi punto de vista, totalmente actitud de no querer estar ahí trabajando, pero estás, así que por algo será. A lo que yo le dije que si me explican el funcionamiento de SU servicio de terraza al principio, lo más seguro que no me hubiera sentado. He trabajado de cara al público muchas veces, sé que hay mucho que aguantar pero sinceramente no me puse ni agresiva ni canteada como ella consideró, pero es lo que tiene estar quemada… Y creo yo…. Si más gente ha hecho comentarios… será por algo, no creo que a todos nos falte una paciencia así, sino que el funcionamiento tampoco es el mejor del mundo…Ver a dos personas tomándose tooodo su tiempo y tranquilamente para servir a gente no es ni mucho menos, mi experiencia en otros tantísimos bares de Bilbao o de otros sitios. Entiendo muchas cosas, tengo paciencia, pero estar 15 minutos cuando no había barullo esperando a que pongan 4 cosas… va a ser que no. Tengo claro que no volveré. Y para colmo, un pintxo de 2 champis con Ali Oli es pintxo Gourmet y te cuesta 4€ en la terraza, 28€ en total. Conclusión , primera...
Read moreMAL TRATO E INSULTOS La conversación con el encargado empieza con muestras de agresividad por su parte y acaba en insultos. En cosa de 2 minutos. Ya veo que no somos lxs primerxs a los que nos trata así este señor. Eso para comenzar el relato. Voy a ser lo más aséptica y descriptiva posible. La camarera, un encanto y nos atendió perfectamente. 2 rondas de vinos/cervezas + algo de picoteo. Casi 100€. Es un auténtico despropósito el trato que recibimos por preguntar a qué se debía el aumento de precio con respecto a la carta (nos explican que es un 15% aplicado por el servicio de terraza). No hay carteles visibles en la terraza que mencionen los suplementos. Según la OCU, es legal hacerlo "siempre que se informe al cliente de manera clara y visible antes de que realice su pedido". No fuimos informados. Esto es denunciable señor encargado. Mención clara en la carta (?) debe ser una letra más pequeña que las del banco...yo al menos, no la vi en la carta de comida. Para las bebidas no hubo carta. El encargado nos señaló un cartel inespecífico en un rincón dentro del bar, al cual, si te sientas en la terraza, obviamente, no tienes acceso. No hubo aviso verbal por parte del personal. El suplemento debe estar detallado en la cuenta final. En este caso se aplicó a cada consumición y cada ración de comida. Es ilegal añadirlo sin previo aviso. No se detalla en ninguna parte del ticket que dicho suplemento corresponde al "servicio de terraza". Esto, señor encargado, no es legal y es denunciable. Los camareros/as (en este caso el encargado) deben estar preparados (habilidades sociales y comunicativas incluidas…empatía, amabilidad y esas “cosas”) para dar una respuesta amable a una pregunta amable, sin entrar en conflicto y mucho menos insultar de un modo tan agresivo. Hay muchos bares en Bilbao, menos caros, con mejores ofertas gastronómicas y gente normal y amable que sabe llevar un negocio de cara al público. A un bar se puede no volver porque no te gusta la música, te resulta caro, el ambiente no es tu rollo, no te satisface la calidad de su oferta o el baño está sucio... pero tanta reseña sobre el trato recibido por parte de un encargado agresivo, hágaselo mirar...
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