Bar Catachu — Restaurant in Pamplona

Best meal we had in Pamplona during San Fermin. This restaurant was recommended by our hotel receptionist (it’s the only reason we knew the restaurant existed). My girlfriend and I are both American and monolingual English speakers (cringy, right?!); I forgot my English to Spanish translation book in the hotel so when I got there I hit a roadblock looking at the Spanish only menu but an ultra kind server (named Carla) went WAY above and beyond translating the menu and making recommendations for us - she even brought out a small plate of an entree that we didn’t order just to give us another taste of “local food”. Carla and Fran (both of our servers) made the meal incredible but the food there was also awesome! Got a pepper plate and muscles with marinara for appetizers, lamb + potatoes and tuna with tomato sauce (with peppers), and for dessert we got an apple tart and a chocolate/vanilla pudding cake. It was excellent and cheap but the service there (mainly Carla) rocked it for us!...

La comida muy rica y las camareras son muy amables. Al César lo que es del César.

Es un local que se llena bastante y a veces puede haber bastante ruido, pero no es algo que llegue a ser molesto como para no ir.

A nivel de calidad en la comida, creo que está bastante bien. Es comida casera, rica y a la que poca pega se le puede sacar.

El servicio es rápido y amable, a nivel general, creo que trabajan muy bien.

Ahora bien, te preguntarás por qué dejo tres estrellas tras todo lo comentado...

Voy a relatar una situación que viví el domingo al ir a comer con mi familia por una celebración. Y es que sí, los celíacos somos muy pesado y repetimos las cosas, pero no sin motivo. Dejo esta reseña aquí ya que como dije, estaba de celebración y lo último que me apetecía era amargarme la comida y discutir. Sin embargo, si el restaurante quiere hablar conmigo, que responda a esta reseña y tengo 0 problemas en llamar o acercarme.

Nada más llegar comenté que era celíaco, mi madre al hacer la reserva, ya lo había comentado. Pero el propio restaurante indica que se avise. Aproveché para pedir el pan sin gluten ya que generalmente está congelado y lleva unos minutos el calentarlo.

Bueno, nunca llegó el pan, ni nadie se dió cuenta. Ya para el segundo plato pasé de reclamarlo, porque era una carne y no tenía sentido a esas alturas de la comida.

Al tomarnos comanda, pregunté si podía comer todos los platos marcados con asterisco y si eran adaptados o libres de gluten per sé (en otros sitios me he encontrado que el playo adaptado consistía en quitarte medio plato, así que creo que la pregunta procedía). A lo cual me contestaron que sí, menos un plato que contenía huevo... ¿Realmente esta camarera sabe en qué consiste la celiaquía? Diría que no.

Evidentemente esto no me causó especial seguridad, así que al pedir los platos remarqué el que eran para un celíaco. No sufrí síntoma alguno de intoxicación, así que probablemente en cocina hicieron bien las cosas. Lo que sí que sufrí es la sorna de la camarera comentándole a otra compañera que me había dicho tres veces lo del gluten (sí, la camarera que confunde gluten con huevo o yo que sé).

Trabajo cara al público, creo que no hay que decir mucho de la falta de profesionalidad de reírte de la condición médica de un cliente en su presencia. Principalmente después de haberte puesto en evidencia al mostrar que no tienes mucha idea de dicha condición médica.

Ánimo al restaurante a qué se ponga en contacto con la Asociación de Celiacos de Navarra que ofertan formación a la plantilla y certifican que el establecimiento es apto para personas que sufren de celiaquía.

Existen números establecimientos que ya lo han hecho y que han ganado un gran número de clientes celíacos, así que el coste de formarse creo que puede ser realmente rentable. Y sobre todo, se pone fin a jugar con la salud de las personas, ya que ningún celíac@ eligió serlo.

Gracias por leer todo el comentario y lo dicho, a su...

Llame con antelación para realizar la reserva para el dia sabado y cuando me responden me dice si tu vienes siempre ven sin reserva y le respondo no es la primera vez que voy acudir. Al llegar la camarera que esta en la barra o mostrador me dice esa mesa es tuya y solo la señala y te presionan por realizar el pedido, la camarera que nos atendió fue la que estaba en el mostrador y gestionaba las reservas siempre salía comiendo de la cocina y cuando se acercaba a tomar nota quería que sea rápido, la camarera que nos atendió llamaba mucho la atención su forma de trabajar porque no se le entendía cuando hablaba y el trato que les daba a sus compañeras de gritarle dejaba que decir y más se ella se bromeaba con los comensales cuando eran hombres y ella solo tenía que tomar esas órdenes me percaté porque justo me sentaron al comenzar el comedor y ella le gritaba en la pequeña barra que está. Luego salió comiendo y se puso hablar con la boca llena de comida que falta de respeto de verdad. Y para terminar llego una reserva a las 22:30 y puso una cara de enfado porque no quería atenderlos y les dijo a cocina que tenían una mesa y no recogieran (que nose a que hora cierran cocina un sábado). Muy desagradable la verdad la atención de la camarera porque nisiquiera te preguntaba si te retiraban los platos, solo cogió y se llevó hasta los postres que además dejan que decir eran un postre todo líquido me pedí un mousse de chocolate... pedi la cuenta me la dejo y se fue y nunca más regreso le intentaba llamar y no me hacia caso me puse de pie y tampoco les importaba si iba a pagar y tuve que decir a su compañera que me dijera donde pagaba la cuenta porque sino me quedaba otro rato esperando. Y les pongo 1 estrella porque no se puede poner menos la verdad. Muy desagradable...